Info General

Estudian el efecto benéfico para la salud de algunas plantas de la región Iberá

Con el objetivo de validar el conocimiento etnomedicinal de las comunidades de la región Iberá, un proyecto de investigación coordinado desde la UNNE evaluará los potenciales efectos benéficos para la salud de distintas especies vegetales de uso tradicional, y su posible utilización para elaborar productos fitoterapéuticos.

Es sabido que desde tiempos ancestrales los pobladores de la región de los Esteros del Iberá en Corrientes utilizan plantas nativas para diversas patologías, dolencias y afecciones.

Tomando como sustento dicho conocimiento ancestral, un proyecto coordinado por la UNNE busca validar científicamente los beneficios que se le otorgan a distintas especies para la cura y/o prevención de afecciones de la salud humana, como base para el desarrollo de fitoterapéuticos.

“La etnomedicina del Iberá es muy reconocida, lo que falta es validar científicamente cuáles son los compuestos biológicos de las plantas de uso medicinal, si tienen efectivamente las propiedades que se le atribuyen, y caracterizarlas en función de las condiciones edafológicas y climáticas de la zona” explicó la Dra. María Victoria Aguirre, directora del proyecto.

Al respecto, sostuvo que el objetivo del proyecto es validar el conocimiento etnomedicinal de la región, realizando una bioprospección y evaluación de los potenciales efectos biológicos (anti-inflamatorio, antioxidante, antitumoral y /o alexitérico) de especies vegetales del Iberá mediante estudios multiparamétricos in vitro e in vivo para su aplicación en fitomedicina.

Los fitoterapéuticos son productos medicinales empacados y etiquetados, cuyas sustancias activas provienen de plantas medicinales o asociaciones de éstas o de extractos, tinturas o aceites, presentado en estado bruto o en forma farmacéutica que se utilizan con fines terapéuticos.

La iniciativa forma parte de la convocatoria de “Proyectos de Investigación Científico Científica y Tecnológica Orientados” (PICTO), financiados por la Universidad Nacional del Nordeste y la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica.

El proyecto es coordinado por la Dra. Aguirre, el Dr. Juan Pablo Rodríguez y el Dr. Juan Santiago Todaro, del Laboratorio de Investigaciones Bioquímicas (LIBIM) de la Facultad de Medicina de la UNNE y la Dra. Ana María Torres del Laboratorio de Productos Naturales Ing. Armando Ricciardi (LabProdNat) de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales y Agrimensura (FaCENA). La identificación de los metabolitos secundarios bioactivos será posible gracias a la colaboración del Dr. Eduardo Dellacassa Beltrame de la UdelaR (Uruguay).

Colabora además un nutrido grupo de investigadores, becarios doctorales y estudiantes de ambas unidades académicas con la participación multidisciplinaria de bioquímicos, licenciados en química, botánicos, biólogos y personal técnico.

ESPECIES SELECCIONADAS

Para el estudio fueron seleccionadas cuatro especies reconocidas por su uso tradicional medicinal en la región Iberá.

Una de las especies seleccionadas es Cissampelos pariera L., conocida con los nombres comunes de abuta, ka´apeva, ysypó-moroti, caá pebá, zarza, pareira brava, mil hombres, lagupatha, entre otras denominaciones. En la etnomedicina esta planta es utilizada para el tratamiento de fístulas, prurito, irritaciones cutáneas e intoxicación por animales venenosos.

Otra especie que se estudiará es Casearia sylvestris Sw., también llamada burro-kaá, guacatonga o café bravo, que tiene uso tradicional como antipirético, antiveneno, antibacteriano y antiinflamatorio en diversas dolencias.

También se estudiará la planta Plantago tomentosa Lam, más conocida como “Llantén”, que es utilizada como diurético, antidiarreico, expectorante, antiulceroso y hemostático. También se utiliza para infecciones cutáneas, conjuntivitis, quemaduras y picaduras de insectos.

Por último, Croton urucurana Baillon, con nombre vulgar de sangre de drago, de uso tradicional como antinflamatorio, analgésico, antiulceroso, antioxidante y con potencial efecto anticancerígeno.

"Nos pareció apropiado enfocarnos en el estudio de estas especies, que podrían constituir fuentes de moléculas activas como nuevos fitoterapéuticos, una vez validadas sus propiedades biológicas y su ausencia de toxicidad" reiteró la directora del proyecto.

ETAPAS DEL PROYECTO

En el trabajo, se partirá de la recolección de especies vegetales, en distintas épocas del año, y de distintas partes de las plantas.

A la fracción volátil de la planta se la estudiará a partir de los aceites esenciales que se obtendrán por destilación por vapor de agua. Además, se harán análisis de principios y metabolitos secundarios por análisis de cromatografía gaseosa FID y cromatografía gaseosa acoplada a espectrometría de masa.

La fracción no volátil de la planta será estudiada a partir de la obtención de extractos con diferentes composiciones de solventes, los cuales serán desecados al vacío en rotavapor y analizada su composición química.

Los estudios in vitro se harán por diversas metodologías. Se evaluará que no sean tóxicos mediante el estudio de citotoxicidad en cultivos celulares y además se analizarán los efectos antinflamatorios, antioxidante y antitumoral.

En tanto, los estudios in vivo se realizarán con animales experimentales suministrados por el Bioterio de la Facultad de Medicina de la UNNE, en los que se estudiarán la actividad anti edematogénica, actividad analgésica, actividad antioxidante y el efecto antiveneno o alexitérico (atenuación de necrosis y hemorragias locales por picaduras de serpientes, como la yarará chica Bothrops diporus).

En ese sentido, la Dra. Aguirre explicó que actualmente muchos antiinflamatorios y anticancerígenos poseen comprobados efectos secundarios y/o alta restricción en su dosificación por la alta toxicidad en diversos órganos y tejidos sanos. “Por lo tanto, si encontrásemos una especie con propiedades nuevas y valiosas a partir de vegetales de la región sin estos efectos indeseables, podría ser un aporte muy importante desde esta investigación básica preliminar”, sostuvo.

“Todos estos estudios nos darán fundamentos científicos para validar las actividades biológicas de las distintas plantas estudiadas, brindando una base importante para la bioprospección de estas especies vegetales, que podrían contribuir a sentar el desarrollo de Fitoterapéuticos” finalizó la Dra. Aguirre.

UNNE PLANTAS IBERA ESTUDIOS

Estás navegando la versión AMP

Leé la nota completa en la web