Desde el Espacio para la Memoria y para la Promoción y Defensa de los Derechos Humanos (ex Esma), el mandatario resaltó la importancia de "no dejar de mirar para atrás" y cruzó a quienes piden que se deje de recordar el pasado.
"Muchos quieren que el olvido nos gane y que dejemos de recordar el pasado. Pero cuando uno deja de mirar para atrás seguramente choca", resaltó el presidente Alberto Fernández en el marco de un homenaje a trabajadores detenidos-desaparecidos durante la dictadura cívico militar, a 45 años del golpe de Estado del 24 de marzo de 1976.
Desde el Espacio para la Memoria y para la Promoción y Defensa de los Derechos Humanos (ex Esma), el mandatario remarcó la importancia de mantener viva la memoria. "El 24 de marzo empezó la mayor tragedia de la sociedad argentina, que no debemos olvidar nunca", subrayó.
En otro pasaje de su discurso, cruzó las críticas que la oposición enarborlaron contra su gestión y los operativos de vacunación. “Los que estamos aquí queremos que todos puedan vacunarse, en la fila de ellos que compren la vacuna los que tienen plata”, indicó en una clara referencia a los dichos de la ex ministra de Seguridad Patricia Bullrich sobre la privatización de vacunas que impulsaría el macrismo.
En una mención a la labor de la Abuelas de Plaza de Mayo, el Presidente dijo: “Ellas solas se pararon frente al poder a reclamar. En cada una de ellas hay un modelo a seguir que nos dice que no bajes los brazos”.
A su vez, señaló que cinco miembros del gabinete nacional son hijos de desaparecidos: los ministros Wado de Pedro y Juan Cabandié, la titular de la Anses, Fernanda Raverta, la titular del Inadi, Victoria Donda, y el secretario Horacio Pietragalla. “Demuestra que la lucha de sus padres y sus madres no fue en vano”, señaló el Presidente.
Y recordó un pedido que hizo el expresidente Néstor Kirchner cuando Fernández era jefe de Gabinete: “Un día hablamos con Néstor de que la Esma deje de ser un lugar de la armada para que pase a ser un lugar de acceso público para la memoria”. Continuó: “Vine con el entonces jefe de la armada y me llevó a recorrer el casino de oficiales. No salía de mi asombro. Me mostraron un garaje donde me dijeron que terminó muriendo Rodolfo Walsh”.
El encuentro fue organizado por H.I.J.O.S. Capital y la agrupación Intersindical Derechos Humanos, que integran la CGT y la CTA.
De la ceremonia participaron integrantes de distintos organismos de derechos humanos como Taty Almeida (Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora) y Estela de Carlotto (Abuelas de Plaza de Mayo), y dirigentes gremialistas como Héctor Daer (CGT), Víctor Santa María (Suterh) y Hugo Yasky (CTA).
A su turno, Taty Almeida dijo: “A pesar de los bastones y las sillas de ruedas, seguimos de pie”. Y agregó: “No me voy a cansar de repetir que los 30 mil no fueron ni por estúpidos ni perejiles, eran militantes políticos”. Además, repudió las bolsas mortuorias que integrantes de la juventud de Juntos por el Cambio colocó en una marcha en Plaza de Mayo.