Las flores de Bach conforman una de las terapias alternativas y naturales más utilizadas en el mundo para tratar las emociones y poder enfrentar nuestros diferentes padecimientos.


El Dr. Edward Bach desarrolló un sistema natural basado en 38 esencias florales. Trabajó como médico y patólogo en Inglaterra, hace ya casi un siglo, y en el trabajo de su consultorio empezó a relacionar los síntomas y enfermedades de las personas con su estado emocional.


Su método, pariente de la Homeopatía, concibe que la enfermedad radica en un desequilibrio entre cuerpo, mente y alma. En sus palabras “Si seguimos nuestros propios instintos, nuestros propios anhelos, nuestros propios pensamientos, nuestros propios deseos, no deberíamos conocer nada que no sea gozo y salud”.


Así, realizando investigación con las flores silvestres y sus pacientes, desarrolló lo que hoy se conoce como Sistema Bach y que describe en sus libros.


Cada flor corresponde a una cualidad, por ejemplo, la paciencia y se indica cuando debe tratarse determinado desequilibrio. En general las flores se trabajan en encuentros de una hora, con personas que se llaman Consultores en Flores de Bach o Practitioners, donde se habla de “cómo sufre el que sufre”, qué le pasa a la persona, que cada uno pueda iniciar un camino de auto conocimiento de sus emociones, de sus problemas.


Así, se eligen determinadas flores (no más de 7 por frasco) que la persona tomará durante dos o tres semanas, según las indicaciones de la persona capacitada y hasta volver a la próxima consulta a compartir sus experiencias y sensaciones.


Las flores trabajan sobre las emociones, como pelando una cebolla, capa por capa, hasta llegar más profundo. Al ser naturales no tienen ningún tipo de contra indicación y las pueden tomar personas de todas las edades.


Desde ya no suplantan tratamientos médicos o psiquiátricos, pero si son un gran complemento de los mismos.

Grupos de emociones según el Dr. Bach

Bach describió 7 grupos de emociones y buscó para cada grupo flores que actuaran sobre ese desequilibrio emocional.


Miedo: miedo a las cosas conocidas (una araña) o miedos desconocidos, exceso de preocupación por los demás, etc.

Incertidumbre: indecisión, buscar consejo en los demás. Falta de esperanza, etc.

Falta de interés en el presente: personas soñadoras, o nostálgicas, con resignación, apatía.

Soledad. personas orgullosas, distantes, egocéntricas, impacientes, etc.

Desaliento y desesperación: culpa, auto reproche, resentimiento, odio hacia uno mismo, etc.

Hipersensibilidad a ideas o influencias: odio, envidia, celos, sumisión, y otras sensaciones del estilo.

Exceso de preocupación por los demás: personas inflexibles, dominantes, intolerantes, etc


Así, entendiendo y poniendo palabra en las emociones, se apela a la propiedad de cada flor. Por ejemplo Walnut ayudará en los momentos de cambios, Mimulus en una situación de miedo conocido, Rock Rose en caso de un miedo que paralice, Impatient la Impaciencia, y así.


Las flores pueden ser preparadas por el mismo terapeuta o por una farmacia especializada.


Después de Bach surgieron otros sistemas florales como Bush, California y Saint Germain, que en muchos casos se pueden usar combinados. Como sea, todos apuntan alternativa natural y a una apuesta al camino del auto conocimiento. Desde un lugar de sanación consciente, presente, y en equilibrio con quién de verdad quiero ser en mi vida.

Rescue Remedy (remedio de rescate)

El término Rescue Remedy (en español, Remedio de Rescate) es un preparado de 5 flores de Bach que se utiliza en situaciones de emergencia como ataque de pánico o ataque de ansiedad, traumas o shocks.


Tiene un efecto tranquilizante, calmante y vivificador. De hecho en la actualidad, muchos cirujanos lo dan para tomar antes de después de una cirugía como un remedio natural que ayuda a superar el proceso de una intervención quirúrgica.


Desde ya ningún remedio natural debe suplantar tratamientos médicos, pero si pueden ser un gran complemento.


El trabajo con Flores de Bach es un método terapéutico alternativo concebido para enfrentar nuestros diferentes padecimientos como seres humanos.


Las esencias florales nos ayudan a superarlos y a transformar positivamente nuestro estado emocional y anímico, nos liberan de las tensiones, el estrés y de los obstáculos internos que nos traban, mejorando así nuestra salud y calidad de vida.


Y el trabajo con la carta natal tiene que ver con descubrir las energías con las cuales venimos a este mundo y con las energías que tenemos que aprender, para estar en equilibrio. Ambas propuestas invitan al consultante a conocerse, a poner nombre a sus emociones, a entenderlas y a auto sanarse.



Se sospecha que el Dr. Bach era astrólogo o sabía muchísimo del tema, (aunque no está comprobado) y que cuando escribió “Los doce curadores” cada una de estas flores refería a una energía lunar de la carta natal. Si bien nada de esto está comprobado, muchas veces en la terapia alternativa se cruzan estas dos escuelas. Por ejemplo, una persona con mucho Marte en su carta, personas con Sol o Luna en Aries, pueden vivir esta energía en exceso: sentir que son muy impacientes, torpes, que no pueden quedarse quietos, que les cuesta dormir. En este caso la flor recomendada sería Impatient.


La misma se puede utilizar si a la persona le estaría faltando esta energía vital de emprender cosas. Como sea, la carta natal es un mapa que ayuda a comprender energías y las flores ayudan a trabajarlas, buscando en ese conocimiento el equilibrio emocional de cada persona.