Los cuerpos fueron localizados por la mañana en un camino rural del municipio de Camargo, cerca del límite con el estado de Nuevo Léon, fronterizo con Texas, en el sur de Estados Unidos.



México vive una ola de violencia ligada al crimen organizado, especialmente cárteles de las drogas que se disputan las rutas hacia Estados Unidos.

Diecinueve cuerpos fueron hallados calcinados en un camino rural de una zona fronteriza de México con Estados Unidos, informó la Fiscalía del estado mexicano de Tamaulipas.


En un comunicado emitido en las últimas horas, la Fiscalía señaló que los policías estatales localizaron “dos vehículos calcinados, así como restos de personas”.

Dos cadáveres calcinados estaban en los asientos delanteros de uno de los vehículos --una camioneta de carga--, otros dos afuera y 15 en la parte trasera, detalló el texto, según recogió la agencia de noticias AFP.

Los cuerpos fueron localizados por la mañana en un camino rural del municipio de Camargo, cerca del límite con el estado de Nuevo Léon, fronterizo con Texas, en el sur de Estados Unidos.

Según las primeras indagatorias, "la muerte fue provocada por proyectiles de arma de fuego y después se les prendió fuego”. Sin embargo, los casquillos de bala no se encontraron en el lugar, por lo que la Fiscalía señala que las víctimas pudieron ser asesinadas en otro sitio.

Los cuerpos ya son analizados por expertos forenses, pero el daño provocado por el fuego dificulta su identificación, detalló una fuente de la fiscalía a la agencia francesa.

Esta zona es escenario de disputas entre el cártel del Noreste, que controla parte de Nuevo León, y el del Golfo, que por décadas ha actuado en Tamaulipas.

Camargo es vecino de Miguel Alemán, el municipio donde en enero de 2019 fueron localizados 24 cuerpos sin vida, 15 de ellos calcinados, además de cinco camionetas, también incendiadas, luego de enfrentamientos entre grupos criminales.

México vive una ola de violencia ligada al crimen organizado, especialmente cárteles de las drogas que se disputan las rutas hacia Estados Unidos.

Desde diciembre 2006, cuando el Gobierno federal de Felipe Calderón lanzó su guerra contra el narcotráfico, con auspicio y financiación de Estados Unidos, se registraron más de 250.000 muertes violentas y unas 60.000 desapariciones, la mayoría vinculadas a hechos criminales o ejecuciones extrajudiciales de las fuerzas de seguridad.

Analistas señalan que uno de los desafíos para México en su relación con el nuevo presidente estadounidense, el demócrata Joe Biden, será la lucha antidrogas.

En ese marco, el actual presidente Andrés Manual López Obrador busca terminar con la Iniciativa Mérida, el acuerdo de cooperación mediante el cual Estados Unidos brindó asistencia militar y policial desde 2006.

En diciembre, tras la captura en Los Ángeles del exministro de Defensa Salvador Cienfuegos acusado de narcotráfico, legisladores mexicanos votaron una reforma legal que acota la actuación de agentes extranjeros en México.