La Selección Argentina es el único motivo que logra unir en un mismo sentimiento a todo el país, hermanarlo por una causa común. Cada presentación de la Albiceleste es un deleite a los ojos para un pueblo sufrido, que viene pasándola mal hace rato y encuentra al menos el consuelo, por unas horas, de tener un momento agradable, feliz, de orgullo, cada vez que le toca ver a este puñado de jugadores, cuerpo técnico y plantel en general, que han vuelto a generar ese amor genuino con su público, formando todos una gran familia.
En ese sentido, y tras otra exitosa jornada de Eliminatorias Sudamericanas, en la que el equipo de Lionel Scaloni empató en un partido injugable ante Venezuela por las condiciones del campo de juego y luego despachó con facilidad en casa a Bolivia, además de los buenos resultados, el técnico oriundo de Pujato habrá tenido otra grata noticia por estos días, tras el retorno de las principales ligas europeas: la consolidadción de los denominados ‘europibes’, que vienen ganando terreno a pasos agigantados y piden pista para tener una oportunidad. El mensaje es claro: hay recambio, y del bueno…
El primero de esta lista es uno que tuvo la oportunidad de debutar en la último compromiso ante ‘La Verde’ en el Monumental y, en pocos minutos, demostró que tiene condiciones de sobra, sorprendiendo por la facilidad con la que se insertó rápido en partido. Capacidad de conducción por el medio, buen remate de media distancia y también visión de juego, siendo la prosición de enlace la ideal para él. Se trata de Nicolás Paz, quien nació en España pero eligió representar a Argentina.
Surgido del Real Madrid, donde tuvo pocos minutos, lo que lo llevó a emigrar, fue el Como de Italia quien depositó sus ojos en este joven de 20 años y lo incorporó a sus filas. En el conjunto de Cesc Fábregas, con apenas unos encuentros, ha logrado consolidarse y tiene un rol decisivo, siendo titular e influyente en un conjunto armado para sacarle el mejor rendimiento posible. Con un potencial enorme pero también empezando a demostrar en el presente, claramente es una opción a tener en cuenta en un puesto donde no abundan demasiadas opciones, sacando al extraterrestre Lionel Messi.
Otro que viene teniendo un amplio recorrido, mucho más conocido, que ya ha sido convocado anteriormente y sumado presencias, además de ser campeón de la Copa América, es Alejandro Garnacho. Como Nico Paz, el extremo también es nacido en España pero defiende al combinado nacional celeste y blanco. De auténtico perfil encarador, desfachatado, el jugador del Manchester United saca provecho de su velocidad, desborde y desequilibrio individual para marcar diferencia. Además, se amigó cada vez más con el gol, con lindas definiciones.
Sin dudas, representa quizás la mayor apuesta para el mediano-largo plazo, Scaloni lo conoce y prioriza ir llevándolo de a poco, sin apresurar procesos. Sabe que tiene un proyecto más que interesante pero debe terminar de pulirlo en el andamiaje colectivo albiceleste. Compite por la misma posición con Nicolás González. El talento lo tiene, la tarea pasará por ser regular en el funcionamiento individual y trasladar a la Selección esos momentos de lucidez que muestra en el club inglés.
A su vez, quien puede dar fe de un crecimiento sostenido en el último tiempo es el nacido en Pérez, a pocos kilómetros de Rosario, pero radicadp en el Viejo Continente desde los 17 años: Facundo Buonanotte. El talentoso enganche salió de las inferiores de Rosario Central, disputó unos escasos partidos en el Canalla y voló rápido a la Premier League.
De estilo parecido a Paz, el ex auriazul tiene facilidad para llegar al área o asistir, panorama, buena pegada desde afuera y también gol. En Leicester City terminó de encontrar su lugar en el mundo, jugando en la posición que mejor le sienta, de media punta, atrás del centrodelantero. Con la continuidad que necesitaba, pudo explotar lo que ya se intuía cuando dio los primeros pasos en Primera. Scaloni lo volvió a considerar y seguramente pueda tener mayores posibilidades en cancha una vez que la clasificación al Mundial esté asegurada, algo casi certificado.
Estos tres pibes son los que más se han asentado y dado el salto de calidad en la actualidad para empezar a diferenciarse del resto de opciones, que también son para tener en cuenta, ampliando el abanico. Entre ellas, están los casos de Valentín Carboni (estará ausente de las canchas por seis meses debido a una lesión ligamentaria) y Matías Soulé (de gran potencial pero actualmente relegado en la Roma).
Simples ejemplos que demuestran que el recurso futbolístico argentino es inagotable, y si bien la mayoría de esta camada gloriosa todavía está lejos de dar sus últimos pasos en la Selección, se van sumando cada vez más alternativas, sobre todo en puestos de ataque.
Hay para todos los gustos. Dependerá de como estas piezas individuales terminen de amoldarse a un funcionamiento colectivo más que consolidado, con una idea clara independientemente de los nombres, una identidad futbolística sostenida e innegociable juegue quien juegue. Algunos ya lo hicieron y otros todavía tienen un recorrido que hacer, con tiempo de sobra para acomodorse. Hay material. Hay presente y también futuro. Argentina tiene todo para seguir siendo competitiva y peleando por títulos.