Finalizada la participación en el Torneo Federal de Básquetbol, Regatas Corrientes avizora un alentador futuro para sus jugadores más jóvenes. Grandes promesas se lucieron enfrentando a atletas consagrados, y aguardan nuevos objetivos para continuar creciendo.

El Club de Regatas Corrientes fue uno de los 64 equipos de todo el país que iniciaron la competencia, y además entró en el selecto grupo de 9 clubes que presentaron equipos juveniles. En este caso, el Torneo Federal de Básquetbol sirvió como aliciente ante la falta de Liga de Desarrollo en esta temporada.

Si bien el certamen incluyó sólo a jugadores menores de 23 años, la puesta a punto comenzó en febrero con basquetbolistas mayores que aportaron roce y experiencia a sus pares juveniles. En total fueron 14 los remeros que participaron de los 12 partidos disputados contra rivales de Misiones, Corrientes y Chaco.

La institución correntina fue representada por jugadores de un promedio de 19 años de edad, 10 provenientes de Corrientes, además de un dominicano (Abad), un chaqueño (Marcón), un entrerriano (Scacchi) y un juninense (Franchela).

Hubo casos de chicos que estuvieron en un torneo de esta envergadura por primera vez, como Joaquín Belén Cassani, Emanuel Alegre y Benjamín Marcó. Santiago Fiorio, de 19 años, jugó 9 partidos y tuvo su destape como goleador en dos partidazos ante Comunicaciones de Mercedes (17 puntos) y Sarmiento (19 puntos).

En total, el “remero” consiguió 4 victorias, y en sus 8 derrotas solo en una ocasión cayó por más de 10 puntos, lo que marca el nivel alto que dejaron los chicos en cada duelo. Además, el éxito estuvo dado por la posibilidad de insertar a jugadores jóvenes en un plano profesional de gran nivel e historia, y medirlos contra rivales más grandes en edad, experiencia y físico.

Otro de los destacados en el remero fue Joaquín Marcón, que en sus 9 partidos totalizó 134 puntos (14,8 ppp). Fue el goleador en las victorias de local y visitante contra Regatas de Resistencia, y en la derrota como local ante Oberá TC. En ese indicador también se destacó Tobías Franchela, base juninese que sólo jugó 5 partidos, pero promedió 18,4pts. Ambos fueron citados repetidamente a jugar la Liga Nacional por el coach Lucas Victoriano.

Ese es otro plano en el que este torneo es importante para la institución, ya que al darle rodaje a jugadores jóvenes, los pone en consideración del cuerpo técnico del equipo mayor. Asimismo, catapulta a los más prometedores a categorías formativas de la Selección Nacional, como fue el caso de Fabio Gauto (15 puntos de promedio en 11 partidos) que en abril recibió la convocatoria a la preselección U19 para el Mundial de la categoría. Allí, el correntino se codeó con sus pares del resto del país y otros que se desempeñan en el exterior.

LOS CORRENTINOS EN LA VIDRIERA

Felipe Valsangiácomo (17) y Jonathan Monzón (22) fueron los jugadores remeros correntinos que tuvieron asistencia perfecta en los 12 partidos del Federal, además del pivot dominicano Rey Abad (19).

Monzón es un escolta que militó recientemente en las filas del Club Deportivo Colón de Corrientes, y en plena competencia evaluaba su perfomance diciendo: “de a poco me voy adaptando, porque vengo de un equipo en el que yo consumía más la pelota, pero acá es distinto”. En ese sentido, sentenció que “de toda derrota o victoria se saca algo bueno. Tenemos que dar el clic y mirar esas cosas que nos hacen falta para mejorar”.

Valsangiácomo juega en Regatas desde los 7 años, y para él fue su primer torneo a este nivel, enfrentando a rivales de hasta 41 años. Asegura que medirse con ellos “hace tener otra visión del juego, viendo su mentalidad dura para cerrar los partidos. El cuerpo técnico además nos enseñó a confiar en nosotros e ir para adelante”.

Felipe compartió divisiones formativas con varios compañeros de este plantel, como Belén Cassani, Ignacio Marcó, Santiago Fiorio y otros, y reconoce que a futuro quiere “prepararse para volver a competir en este torneo”.

Santiago Fiorio es otro jugador que dio un paso adelante con el gran torneo que tuvo, cumpliendo con creces en los momentos calientes del equipo. El alero es otro de los que viste estos colores desde la categoría de Pañales, y aseveró: “nunca creí que iba a jugar un torneo profesional. Es algo increíble y es algo muy bueno, porque la mayoría crecimos en el club, somos todos amigos y eso hace que todo sea mejor”.

El base Ignacio Marcó, quien hace varios años integra el plantel de LDD y es otra de las joyas del club, tuvo la oportunidad de compartir con su hermano Benjamín un torneo de esta índole. “Fue una muy buena oportunidad para medirnos con gente expermientada, y dimos todo para el equipo”, sentenció el remero.

El interno Patrick Destorel (19), el base Enzo Alvaredo (21) y el alero Facundo González (21) son jóvenes que ya tienen experiencia en torneos nacionales con la camiseta fantasma, y son fruto de las divisiones formativas “remeras”.