Agentes precarizados hicieron un abrazo simbólico en el centro asistencial y fueron intimados por una jefa de personal. “Necesitamos un sueldo digno. $17 mil al mes no alcanza”, dice una pancarta de una trabajadora sanitaria provincial que presta servicios en el Hospital Pediátrico Juan Pablo II.
La protesta se realizó el pasado lunes antes del mediodía por un grupo de trabajadores precariados. Son quienes no pertenecen a planta permanente ni están contratados.
En el momento que los agentes realizaban la protesta, eran intimados por una jefa de personal. “Estoy de acuerdo con el reclamo, pero fuera del horario de trabajo. No mezclen las cosas porque de lo contrario están haciendo abandono de persona”, se escucha a la jefa de personal intimar a enfermeros y enfermeras.
Los reclamos se reiteran varios días a las semanas en diferentes hospitales de la provincia en todo el interior y capital.