El hombre que hoy está acusado de “incendio intencional”, continúa demorado en la comisaría octava. Tienen miedo de que quede en libertad.



Al cumplirse una semana del incendio de la vivienda de Luciana Lugo, víctima de violencia de género en el barrio Loma Linda, el abogado de la mujer, Juan Manuel Cubilla, adelantó a El Litoral que el próximo viernes pedirá que la Justicia caratule la causa como “intento de femicidio”. Este medio gráfico pudo conocer por fuentes policiales, que el hombre, Sergio Santa Cruz, sigue demorado en la comisaría Octava del barrio Laguna Seca por “incendio intencional”. La madre de cinco niños, comentó que “me roció alcohol y me empujaba hacia el fuego” y que recibió “amenazas por mensajes en el celular”. 



“La información que tenemos es que sigue demorado en la comisaría, si continúa con la misma carátula (incendio intencional) es muy probable que pueda salir. Luciana Lugo se presentará como querella y pediremos que se revea la causa. Solicitaremos que la Justicia caratule como intento de femicidio”, dijo a El Litoral Cubilla, quien es también abogado de la familia de Librada Haedo (víctima de femicidio cuyo detenido está alojado en el Hospital de Salud Mental San Francisco de Asís).



En este sentido, dijo que se presentarán el viernes como querellantes. “Luciana pudo perder su vida en ese incendio y no sólo ella, también pudo haber provocado daños a todo el barrio”. “Vamos a buscar que la imputación se amplíe por estrago y tentativa de femicidio. También se va a presentar una medida cautelar que debería determinar una restricción, perimetral, para que el acusado no se acerque a ella y tampoco a sus hijos, esto si saliera en libertad”, comentó el abogado. Por su parte, Soledad Roch, referente de Barrios de Pie y La Colectiva, dijo a este diario: “Estamos acompañando a Luciana, es importante que el agresor no salga ya que lo acusan de incendio intencional y él intentó asesinar a su ex pareja, ella estaba dentro de su vivienda en el momento que prendió fuego a la misma”.



“La Justicia y la Policía no tienen perspectiva de género, por eso en el mejor de los casos las víctimas de violencia de género terminamos en el hospital, otras terminan en los cementerios”, comentó Roch.

Por su parte, Luciana expresó a El Litoral que se siente acompañada por “vecinos y familiares”. “Tenía que ir hasta el Consejo de la Mujer pero no me sentía bien”, comentó.



Cabe recordar que el hecho ocurrió el martes 4 de julio después de las 17 en una casilla de cuatro paredes de chapas de cartón, donde dormían siete personas, ubicada en Francia al 2800, frente a Villa Raquel.



“Cuando llegué de buscar a mi hija del jardín lo encontré adentro de la casa y ahí empezamos a discutir porque se quería llevar la cama donde duermo con una de mis nenas. Estábamos discutiendo cuando comenzó a rociar alcohol en la cama y tiró un papel con fuego. Dos de los chicos estaban en la escuela, la que vino del jardín, en lo de mi hermana a dos casas de la mía, y los otros jugando al fútbol, ninguno vio lo que pasó. Acá vivíamos mi pareja y mis cinco hijos, es una sola pieza”, dijo la mujer al día siguiente de lo acontecido a El Litoral.  Respecto a lo sucedido, continuó: “Cuando inició el fuego me quería acercar para apagar pero me sentí toda mojada, estaba recostada en la cama y a mí también me había rociado alcohol, si me acercaba me prendía fuego, él me empujaba para que sucediera eso. Al ver que se prendía fuego la casa él huyó y ahí pude salir a pedir auxilio, parece que nadie me creyó (vecinos) o no se querían meter, después vieron que el fuego salía por todos lados y ahí uno de los vecinos decidió llamar a la Policía y bomberos. Ellos también intentaron apagar pero sólo lo lograron los bomberos”.