El equipo correntino no encontró respuestas para torcer el trámite del partido y anoche perdió 99 a 72. La Gloria dominó el juego desde el primer cuarto y puso fin a la seguidilla de seis triunfos consecutivos del Rojinegro.

Una clara derrota sufrió anoche San Martín de Corrientes frente a Instituto por 99 a 72 en el marco de la Liga Nacional de Básquetbol. El encuentro que se disputó en el estadio Angel Sandrin de la capital cordobesa mostró al local muy superior en el juego y en el marcador donde llegó a tener 31 puntos de ventaja.

De esta forma, para San Martín (16-9) concluyó una racha positiva de seis triunfos consecutivos e Instituto (16-10) extendió a cuatro la cantidad de victorias seguidas.

Solamente los primeros minutos fueron equilibrados, después San Martín se vio superado por el andar de Instituto que se mostró sólido en defensa, con constantes cambios de sistemas, y efectivo en el ataque.

El Rojinegro estuvo ordenado en defensa y trató de ser paciente para atacar, pero le costó hacer llegar la pelota a la zona pintada y debió recurrir a los tiros de tres puntos sin efectividad.

Precisamente los triples, le abrieron el juego a Instituto durante el primer cuarto. Metió 6 de los 9 intentos y se escapó en el marcador 26 a 15.

En el segundo cuarto, San Martín tardó 2 minutos y medio an poder anotar, lo hizo con un triple de Basabe, situación que Instituto aprovechó para tomar una mayor ventaja.

El Rojinegro siguió con su baja efectividad en los tiros a distancia y sin segundas opciones en la ofensiva, fue perdiendo terreno frente a un rival muy firme que tuvo como principal vía anotadora a Nicolás Romano (21 puntos en total).

Un esbozo de reacción se dio en el tercer capítulo. Las conversiones de Jonathan Machuca, Santiago Ferreyrra y Rolando Vallejos achicaron un poco la brecha.

El local mantuvo la serenidad, hizo circular la pelota en la ofensiva hasta encontrar buenas opciones de lanzamientos. Así, la efectividad creció y sacó una ventaja de 31 puntos.

El resto del partido estuvo de más. San Martín nunca encontró la forma de equilibrar las acciones y los dirigidos por Lucas Victoriano jugaron con la tranquilidad que le daba el marcador y la cuenta regresiva para el final del encuentro.

Ahora habrá un pequeño receso por las eliminatorias al mundial, y San Martín recién volverá a jugar el 1 de marzo cuando visitará a Peñarol de Mar del Plata.