Lo que anticiparon delegados sindicales en el ente autárquico intervenido por el Ejecutivo provincial, se empezó a cumplir. Fue despedido un chofer precarizado laboralmente como monotributista después de 18 años. Hay alarma en el personal.
Tras 40 años de existencia el programa social EPAM fue cerrado por las autoridades del Instituto de Vivienda de Corrientes (INVICO) y desde entonce inició un proceso “persecución a los trabajadores”, denuncian los delegados sindicales.
Ayer fue despedido un chofer con 18 años de antigüedad que se desempeñaba como monotributista, precarizado laboralmente y también hay traslados de todo el personal que se desempeña en el programa social de construcción de viviendas EPAM.
“Ahora el invico se dedica a perseguir delegados gremiales, y a trasladar y despedir trabajadores en vez de reactivar la construcción de viviendas que dé respuesta a las más de 80.000 familias inscriptas que necesitan una solución habitacional”, expresaron delegados de ATE.
El cierre del mencionado programa fue de manera intempestiva, sin aviso ni comunicación oficial por parte de las autoridades de la intervención en el organismo.
Se sabe que será una empresa privada la que se hará cargo de las obras que se tenían previstas iniciar y continuar con el programa ahora concluido.
Pero todo es extraoficialmente ya que nunca hay comunicación oficial. Ni dentro ni hacia afuera del INVICO.