Política

IOSCor, ¿una bomba a punto de estallar?

Crédito: 46904

Fuentes consultadas por CorrientesHoy.com aseguran que en esta semana que se inicia, comenzarían una serie de reuniones formales y de las asambleas otras espontáneas, tendientes a echarle un poco de luz a todo lo que se dice y desconfía de las entrañas institucionales de la obra social correntina más importante de los empleados públicos.

 

Al malestar general de los empleados por los salarios caídos que perdieron más del 10% con respecto a la escalada inflacionaria, se suman los descuentos no devueltos que oscilaron entre $2.500 y $3.000 –considerados ilegales- para los que paralizaron el edificio de San Juan y San Martín durante los meses de septiembre y octubre del año pasado por reclamos –justamente- de mejores salarios; más la resistencia a la continuidad de la intervención, en manos de Raúl Esquercia y mucho más rechazo a la permanencia en el cargo de gerente del contador Manuel Gustavo Vega, quien en su momento fue sumariado, cesanteado y repuesto en el cargo por una medida judicial de larga data. Situación anómala por dónde se lo mire.

 

Como si fuera poco, los empleados en general y los delegados en particular quieren abrir las ventanas del IOSCor, de cara al año político que empezó con todo, para lograr un compromiso público de los candidatos a la gobernación de la provincia, buscando esclarecer tantos años, según se dice, de manejos administrativos que no fueron del todo claros. Con adjudicaciones directas de compras a familiares de funcionarios de la obra social; y préstamos millonarios y fuera de toda normativa que lo autorice, cedidos a servicios privados de salud. Entre otras perlas que denunciarán nuevamente los empleados, en caso que los aspirantes a la gobernación provincial se animen a recibirlos.

 

En la frutilla de la torta se ubica la serie de traslados, por “funcionalidad” según se justifica, de algunos empleados que estuvieron en la protesta bimestral del año pasado, los fuertes descuentos que recibieron en sus salarios, deprimiéndolos aún más y, lo que sería llamativo, el descabezamiento de algunas áreas contables, donde quieren poner la lupa sobre ciertos movimientos monetarios brindados desde la obra social IOSCOR, hacia algunos de sus “prestatarios” y “proveedores”.

 

Todo esto hace que se conjugue una peligrosa alquimia en el organismo social provincial, intervenido hace mucho tiempo, que podría tornarse altamente combustible en cualquier momento.

Estás navegando la versión AMP

Leé la nota completa en la web