Consternados por el derrumbe de la obra de ampliación de la Escuela 962 de Coronel Du Graty se disparó la normal curiosidad por conocer cuál fue la empresa encargada de llevar adelante los trabajos. Es que el intendente Juan Carlos Polini denunció que no fue la acción del viento la que provocó la caída, sino deficiencias constructivas.



Las declaraciones del jefe comunal fortalecieron algunos de los interrogantes y empezó a ponerle andamiaje a una denuncia penal que dirigentes radicales afirman que ya se hizo.



“En el pueblo no hubo ningún tornado ni vientos fuertes, a las 3.30 de la madrugada escuchamos un derrumbe y era este SUM inaugurado por el exgobernador (Jorge Capitanich) antes de las elecciones, se desplomó como una castillo de naipes, por lo tanto vamos a pedir que se investigue qué empresa es la responsable, quién certificó la obra y quién la pagó, esto no puede quedar así,  gracias a Dios no pasó a mayores por el horario, ya que de día funciona la escuela de verano, hubiese sido una desgracia”, dijo Polini, desconociendo quién había hecho los trabajos de una escuela en su pueblo.



Tampoco el gobierno quiso identificar a la empresa constructora. Se informó en seis renglones que  el subsecretario de Infraestructura Escolar Gabriel Lemos, su equipo técnico profesional y los representantes de la empresa constructora, el viernes a la tarde iniciaron las pericias patológicas para determinar cuál fue la causa que hizo que colapsara la estructura del gimnasio cubierto de la Escuela de Educación Primaria (EEP) Nº 962 de Coronel Du Graty, ante una tormenta fuerte que en esa jornada por la mañana azotó a esta localidad.



Si, confirmó ese comunicado lo que dijo el intendente. No hubo tornado, apenas una tormenta fuerte.

Es natural que la parte administrativa haya mostrado apuro en tratar de saber que ocurrió, después de todo “Lemos y su equipo técnico profesional” ya ocupaban esos cargos cuando se licitó la obra y cuando se construyó. Aunque precisamente esa circunstancia debería inhibirlos para investigar el derrumbe.

Mucho más si la Justicia recibió una denuncia del intendente Polini. Ni siquiera debieron esperar la denuncia. Prácticamente todos los portales publicaron las imágenes del edificio en ruinas y las declaraciones de Polini. Los fiscales penales no necesitan de una denuncia para intervenir.



A la inversa, hace pocos días el fiscal de Investigación de Villa Angela, Sergio Ríos, se apartó de la instrucción del caso por la desaparición de Maira Benítez por una denuncia que la familia de la joven hizo a través de los medios.



Con todas las publicaciones hechas en relación al caso del edificio escolar alcanzaba para comenzar las investigaciones, por si faltaba la denuncia de Polini. Pero si la hizo, en el lugar ya no debe estar presente el equipo de técnico profesional de Lemos. Los peritajes y las medidas las deben estar encargando el fiscal.



Eso sería no solo lo que el Código manda, sino que las necesidades de transparencia dictan. Jorge Capitanich inauguró la obra el 20 de octubre de 2015. Peppo había ganado un mes antes las elecciones por 13 puntos de diferencia sobre Aída Ayala.



La obra apuntaba a otra elección la nacional que se desarrolló sólo cinco días después del corte de cintas que en el Chaco entregó el triunfo de Daniel Scioli, pero que a nivel general puso a Mauricio  Macri en el Sillón de Rivadavia.



Tampoco en las crónicas oficiales de la época se informa quién era la empresa constructora. Parece un secreto. Pero no lo es. Como dijo Polini, qué empresa es la responsable, quién certificó la obra y quién la pagó.



Lemos lo sabe, viajó a Du Graty “con su equipo técnico profesional y los representantes de la empresa constructora”.



La rectora de la UNNE, Delfina Veiravé, comentó en las redes sociales. “¿Pueden informar cual es la empresa? Así aunque más no sea haya una sanción social”.



Las miradas por el momento no confirmadas apuntan a una empresa de Sáenz Peña que tiene por lo menos una funcionaria clave en el gabinete de Domingo Peppo. La empresa además tiene cuestionamientos por las demoras en la finalización de las obras de la Cámara Federal de Resistencia. Un enorme edificio enfrente a la Plaza 25 de Mayo.



Si se confirma este nombre el gobierno debería apartarse de las pericias, algo que ocurriría instantáneamente si la Justicia interviniera.