Los efectos de calor y falta de lluvias se darían hacia finales de octubre y comienzos de noviembre de este año



Tras casi un año bajo los efectos de El Niño, que trajo abundantes lluvias a la región sobre todo en el segundo semestre del año pasado, desde el Servicio Meteorológico Nacional anunciaron la transición hacia una fase neutral y posterior prevalencia de La Niña.



La Niña se caracteriza por un enfriamiento anormal de las aguas del Pacífico Ecuatorial Oriental. Ese enfriamiento en las aguas provoca cambios en la circulación atmosférica y oceánica, lo que a su vez afecta el clima en diversas partes del mundo “la contraparte de este fenómeno es El Niño de la cual estamos saliendo y pasando por una suerte de transición”.



Comienzo atípico



En cuanto a los efectos esperados mencionó “en general se mencionan las sequías y las temperaturas más cálidas. Lo que estamos observando en las últimas corridas de los modelos para el trimestre a fin de año es que, se presentaría de manera atípica en este primer trimestre”.





Es decir, con mucha variabilidad y sin las características clásicas “así que para agosto se espera más frío, con probabilidad de ocurrencia de heladas incluso de hecho se adelanta un frío para la semana que viene un frente frío con marcados descensos de temperatura. También después más adelante es probable que tengamos otro frente frío; en general todo el trimestre que viene tendríamos temperaturas con anomalías más bajas de lo habitual.



En cuanto a las lluvias se van a presentar de manera muy irregular: “Por ejemplo, mucha lluvia en una semana, superando la media del mes, seguido de 10 días sin lluvia. En agosto probablemente con la segunda quincena más lluviosa; los mayores acumulados en la mitad norte de la provincia. Septiembre más seco, igualmente irregular. Octubre nuevamente un poco más lluvioso con el mismo patrón de irregularidad; y sumado que en octubre se incrementan las probabilidades de tormentas severas, eso siempre ocurre después de este trimestre”.



Efectos durante el verano



En noviembre próximo sí se pasará a una Niña clásica “empieza a evolucionar rápidamente y ahí empezamos a observar más estos efectos como la sequía y temperaturas un poco más elevadas, pero esto recién para finales de octubre y a partir de noviembre en adelante y todo el verano y hasta marzo probablemente”, destacó. Es importante remarcar que los pronósticos y estos impactos de La Niña pueden variar por lo que es fundamental mantenerse informado sobre las actualizaciones y las alertas.



En cifras



65%



En el trimestre julio-agosto-septiembre 2024 (JAS), hay 65% de probabilidad de desarrollo de una fase fría o La Niña.