Es para evitar que las denominaciones "estigmaticen y discriminen". La variante del Reino Unido fue denominada Alpha y la de Sudáfrica se convirtió en Beta, entre otras.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) utilizará letras griegas para simplificar los nombres científicos de las variantes de coronavirus como B.1.617, B.1.1.7 o B.1.35 y para evitar que las denominaciones "estigmaticen y discriminen".
La idea es tener nombres "fáciles de pronunciar y recordar", pero también evitar que el gran público y la prensa utilicen designaciones que "estigmaticen y discriminen", señaló la OMS en un comunicado.
En Estados Unidos, por ejemplo, los ataques contra las personas de origen asiático se incrementaron y Donald Trump, que era presidente durante el primer año de la pandemia, hizo todo lo posible para acusar a China, donde el nuevo coronavirus fue detectado por primera vez.
Trump se refería a veces al virus chino o al "Kung Flu" (juego de palabras sobre Kung Fu y flu, que significa gripe).
Los nombres científicos siguen existiendo pues suministran datos útiles a los expertos, pero la OMS no los utilizará en su comunicación diaria.
De esta forma, la variante B.1.1.7, identificada antes en Reino Unido, fue denominada Alpha, la B.1.351, identificada por primera vez en Sudáfrica, se convirtió en Beta y la variante P.1, detectada en Brasil, Gamma.
La OMS dio también dos nombres diferentes a las subvariantes del B.1.617 que devastó a India y se extendió a otros países: B.1.617.2 fue llamado Delta y B.1.617.1 Kappa.
Por otra parte, Europa se apresta a lanzar la plataforma para el pase digital UE Covid, que permitirá desplazarse sin problemas dentro del continente de cara a las vacaciones de verano que parecen llegar finalmente en el "viejo mundo".