El Gobierno de Corrientes a través del Ministerio de Salud Pública presentó el funcionamiento de la Red Provincial del Accidente Cerebro Vascular (ACV) desde la cual se garantiza la detección, tratamiento oportuno y seguimiento de esta patología.

Ante el marco del día Mundial del Accidente Cerebro Vascular (ACV) en el Salón Verde de Casa de Gobierno se concretó la presentación del funcionamiento de la Red de ACV que se lleva a cabo en Corrientes. Teniendo en cuenta que es la patología es la principal causa de discapacidad permanente y la cuarta causa de muerte en Argentina.

Así la modalidad de gestión de la Red cuenta con una política impulsada por el ministro de Salud Pública, Ricardo Cardozo, y respaldada por el gobernador Gustavo Valdés, que busca alcanzar una mayor capacidad resolutiva de los problemas de salud. Es así que se configura un sistema organizativo, que tiene por finalidad la búsqueda activa de los pacientes en riesgo, ordenar y optimizar los recursos humanos, de infraestructura y los procesos de atención.

A su vez, la Red provincial es coordinada por el doctor Héctor Álvarez, médico especialista en Terapia Intensiva y Neurointensivismo, y por el doctor Martin Cedrolla, neurólogo clínico, buscan garantizar la detección, el tratamiento oportuno y el seguimiento de esta patología.

Sobre el tema, el ministro de Salud Pública, Ricardo Cardozo, expresó que la importancia en la difusión de la patología se debe a que “tiene una alta incidencia, siendo la primera causa de discapacidad que queda como secuela en las personas, y la cuarta causa de muerte”.

“Estamos trabajando en toda la provincia, con una capacidad de resolución rápida teniendo a favor la red de tomógrafos en muchos lugares para realizar el diagnóstico precoz”, subrayó el jefe de la cartera de Salud Púbica.

Asimismo, Cardozo recalcó que es menester que la población reconozca los síntomas de un probable ACV para que inmediatamente asista a un centro de Salud.

Para finalizar, el Ministro agradeció al equipo de la Unidad de Ataque Cerebral, destacando la labor de los médicos Álvarez y Cedrolla.

Seguidamente, Martín Cedrolla, neurólogo y coordinador de la Red de ACV de la Provincia, resaltó que el tiempo es menester en un Accidente Cerebro Vascular porque “mueren más de 2 millones de neuronas por minutos”.

De la misma manera, el doctor explicó que el esfuerzo realizado por el Ministerio en conseguir “una Unidad de Ataque Cerebral habla del tiempo, porque un paciente debe llegar lo antes posible”.

Además, Cedrolla puso de relieve que cuanto menor sea el tiempo sea el ingreso de un paciente con ACV menores serán las secuelas que presentará a futuro.

Otros datos

Además, desde 2017 Corrientes cuenta con la Unidad de Stroke, que funciona en el Hospital Escuela "Gral. José Francisco de San Martín", la cual se encarga de evaluar en etapa hiperaguda a las personas que están sufriendo un ACV isquémico y pueden recibir o no el tratamiento de reperfusión cerebral.

Teniendo en cuenta que el ACV es una enfermedad aguda que se produce cuando se tapa o rompe una arteria del cerebro. Puede ser mortal o dejar a la persona afectada con una discapacidad.

Los síntomas pueden ser diferentes y muy sutiles: debilidad o sensación de que se duerme un lado de la cara, un brazo o una pierna, especialmente del mismo costado; confusión al hablar; problemas para hablar o entender lo que se le dice. Como también puede presentar problemas para caminar, mareos, pérdida de equilibrio o falta de coordinación del cuerpo (por ejemplo, querer agarrar algo y no poder). Además de dolores de cabeza fuertes y repentinos donde las personas con hipertensión, diabetes, colesterol alto y/o tabaquistas tienen más riesgos de sufrir un ACV.

Prevención

Por lo tanto, ante posibles síntomas, se debe llamar a Emergencias o llevarla a una guardia médica más cercana. Cuanto más rápido reciba asistencia médica, aumentan las probabilidades de que la persona se recupere y/o solo le queden secuelas leves.

Un control anual va a servir al médico para saber si hay riesgo de sufrir un ACV y ayudar a reducirlo. Se debe adoptar los hábitos saludables que aconseje el médico: actividad física sostenida, alimentación sana, consumo de frutas y verduras, y reducir el consumo de sal, entre otros.