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10 consejos para mantener el buen funcionamiento de tu heladera

Descubrí cómo mantener tu heladera nueva o antigua con la calidad de siempre.


¿Quién nunca tuvo una heladera antigua con verdadero valor sentimental en la familia, herencia de los padres o de los abuelos? Es que si se cuida bien, una heladera puede ser testigo de muchos capítulos diferentes de nuestra historia.


Para que tu heladera resista al paso de los años, algunos cuidados son fundamentales. Es importante mantenerla siempre limpia, no dejar la puerta abierta y consultar el manual de instrucciones en caso de dudas. El servicio de garantía extendida, que se puede contratar al momento de la compra, también garantiza la mantención gratis por más tiempo. A continuación, te contamos otros consejos que harán que tu heladera te acompañe por mucho tiempo.

1.Limpieza periódica

Algunos trucos pueden ayudar a extender la vida útil de tu heladera. Para empezar, reservate un tiempo para hacer una buena limpieza del electrodoméstico, tanto por dentro como por fuera, ya que esto ayuda a conservarlo y mantenerlo libre de olores.

2. Espacio para respirar

La heladera también necesita respirar un poco. El motor trabaja (y se calienta) para mantener los alimentos debidamente refrigerados, y, a veces, congelados. Por eso, dejar la heladera en lugares apretados, sin ventilación básica, puede sobrecalentar el electrodoméstico, llegando a causar daños e incluso a fundir el motor. Vale la pena dejar un lugar en la cocina solo para la heladera, con los espacios laterales libres y a una distancia segura del horno y de las mesadas.

3. Alimentos higienizados

Es tentador llegar del supermercado o de la feria y simplemente guardar todas las compras en la heladera de una sola vez. Pero dedicarle un tiempo al lavado de los alimentos antes de guardarlos puede hacerle muy bien no sólo a la heladera, sino también a tu salud.

4. Fecha de vencimiento al día

Hablando de vencimiento, te damos otro consejo especial si querés preservar la heladera por más tiempo. ¿Qué te parece crear un calendario simple con la fecha de validez de cada alimento refrigerado o congelado? De esta manera, estás atento a los alimentos que tenés que preparar en los próximos días, disminuís el desperdicio y evitás olvidar algún alimento dentro de la heladera.

Algunos ejemplos para ayudarte:

En el freezer, algunos alimentos pueden durar mucho más, como sucede con las carnes en general. Revisá lo que puede ir allí y aprovechá para envolver y conservar porciones y platos precocinados por más tiempo.

5. Cerrá siempre la puerta

A veces, estamos tan distraídos con algo, que ni nos damos cuenta de que dejamos abierta la puerta de la heladera. El problema es que, con la puerta abierta, la heladera necesita trabajar más para compensar la entrada de aire caliente a su interior, lo que compromete la refrigeración de las comidas y bebidas. Eso genera un gasto de energía aún mayor una vez que el motor intenta, a toda costa, enfriar la temperatura de la heladera, comprometiendo su vida útil.

6. Nada de comida caliente

¿Tenés el hábito de preparar, en un solo día, las comidas para la semana? Si es así, cuando las porciones estén listas, dejalas enfriar hasta que queden a temperatura ambiente. La comida caliente puede sobrecargar el motor de la heladera, ya que la temperatura en el interior también aumenta, llevando a un gasto de energía considerable.

7. Parte de atrás libre

No pongas nunca nada para secar en esta parte de la heladera. El hábito compromete el intercambio de calor entre el electrodoméstico y el ambiente externo, sobrecargando el motor y disminuyendo la vida útil de la máquina.

8. Termostato ajustado

El termostato es el reloj que indica la configuración de la refrigeración interna. Se debe ajustar según algunas condiciones como clima externo, cantidad de alimentos en la heladera e incluso el número de veces que se abre la puerta – todo eso influye en la temperatura. Para mantener tu aparato funcionando en perfecto estado, el consejo es mantener el termostato en la medida correcta siempre que sea posible, para evitar la sobrecarga del motor y la baja conservación de los alimentos.

9. ¿Te mudás? La heladera te acompaña

La heladera puede acompañarte en muchas etapas de tu vida, incluso en una posible mudanza. Para cambiar la heladera de casa sin problemas o grandes dificultades, es necesario apagarla el día anterior y embalarla en un material protector, como un plástico con burbujas, evitando los rayones y golpes. Si la transportás verticalmente, podés encenderla en tu nueva casa en el mismo instante; si está en posición horizontal, consultá el manual para saber cuánto tiempo tenés que esperar para encenderla nuevamente.

10. El manual todo lo sabe

No dejes de hacerte el tiempo para leer el manual de instrucciones con atención. El manual cuenta con todas las informaciones importantes sobre tu heladera, desde la instalación a consejos de uso y limpieza. Esta es otra forma de prolongar la vida útil de tu electrodoméstico y garantizar que funcione perfectamente durante muchos años.

TIPS CUIDADOS

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