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Ley de medios y derecho a la información

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Los grandes grupos económicos, parapetados detrás de los medios de comunicación masiva pretenden derogar – o abrogar – la ley de medios de comunicación audiovisuales- Nº 26.522- so pretexto de algunos excesos, cuya constitucionalidad fue declarada recientemente por la C.S.J.N. Se pretende volver a un modelo pre democrático y so pretexto de la libertad de prensa ( o libertad de empresa) se atentara contra el derecho a la información.

 

El derecho a la información contiene e integra a la libertad de prensa- indispensable para el mantenimiento del sistema democrático- pero también el derecho colectivo a una información veraz y objetiva, y que pone límites al abuso mediante el derecho de rectificación, respuesta, defensa o replica, con el que se custodia la información veraz pero pone límites a la agresión a la honra y dignidad de las personas. Esto está pendiente de reglamentación – reconocido constitucionalmente pero no regulado.

 

El fallo de la CSJN en el caso Clarín – voto del Dr Petracchi- nos recuerda que si bien la ley 26.522 es constitucional el A.F.S.C.A debe ser un organismo técnico y plural pero que el Estado debe regular la pauta estatal de publicidad y propaganda. Todos hacen silencio sepulcral sobre ello, mas ahora.

 

En una sociedad democrática, deliberativa y plural que construya sus juicios sobre la verdad el derecho a la información no puede ser monopolizado ni por los poderosos ni por el Estado con el mal uso, o uso discrecional de los dineros públicos- la discrecionalidad buena o mala nunca puede superar a una reglamentación preestablecida que garantice pluralidad y acceso a todos los medios para que se escuchen todas las voces. De lo contrario solo los poderosos darán su mensaje, su opinión; conformaran los juicios críticos y pueden distorsionar la verdad y lesionar la dignidad del hombre que es el fin supremo de todo Estado de Derecho material.

 

¡¡¡A no perder los derechos y mejorar las conquistas!!! Es necesario cumplir con el fallo de la CSJN, reglamentar – para una justa distribución la pauta de propaganda o publicidad estatal- garantizar el acceso a la información- y preservar el derecho colectivo a una información veraz y objetiva. Es tarea de todos pero mas de aquellos que tenemos un compromiso democrático, con la verdad y el sistema democrático que no se realiza en el marco de relaciones desiguales y sometidos a la prepotencia del dinero o la autoridad de los poderosos de turno.

 

Por el Dr. Armando Rafael Aquino Britos

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