El poder de los zapatos está más que probado cuando en un look anodino metes un buen tacón, unas sandalias especiales o cada vez más, un modelo plano: nunca hay que despreciar las bailarinas y los kitten.
El poder de los zapatos está más que probado cuando en un look anodino metes un buen tacón, unas sandalias especiales o cada vez más, un modelo plano: nunca hay que despreciar las bailarinas y los kitten.
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