Los Pumas perdieron por 48-7 ante Sudáfrica y no pudieron levantar el Rugby Championship por primera vez en la historia, por lo que se lo quedaron los Springboks, que habían sido subcampeones de los All Blacks en 2023.

Más allá de la dura caída, el seleccionado de Felipe Contepomi completó un gran certamen, ya que logró ganarle a los tres rivales y finalizó tercero.

El elenco nacional sufrió todo el poderío del local, que arrancó con mucho ímpetu y se lo llevó puesto desde el inicio porque se adelantó en el marcador mediante las apariciones del fullback Aphelele Fassi y el tercera línea Pieter-Steph du Toit.

Sin embargo, Los Pumas lograron descontar más tarde con un try de Tomás Albornoz, quien también marcó de penal y devolvió la ilusión. Pero más allá de ese descuento, los de Contepomi nunca pudieron doblegar a su rival. Así se fueron al descanso 27 a 7 abajo.

En la segunda mitad, el elenco argentino debió jugar gran parte de esa etapa con un hombre menos por la expulsión de Pablo Matera. Eso condicionó las posibilidades del combinado nacional de descontar y buscar la hazaña.

En desventaja numérica tanto desde el marcador como de jugadores, Los Pumas sufrieron los embates del conjunto africano, que apretó el acelerador en el tramo final y mostró lo mejor de su repertorio, marcando tries y luciéndose ante su gente.

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Más allá de la derrota, el equipo de Felipe Contepomi se lleva sensaciones más que positivas del torneo. Al margen de los triunfos ante las tres potencias del mundo ovalado, pudo plasmar un nivel de juego ofensivo, como hacía tiempo no se veía por estos lares.

La idea pasará ahora por profundizar más de lo que se vio en este Rugby Championship, donde claramente Los Pumas dieron un salto de calidad en su rendimiento, compitiendo de igual a igual con los mejores seleccionados del planeta e incluso superándolos en juego. En definitiva, cierran una competencia inolvidable, con más buenas que malas, y habiendo estado a la puerta de conseguir la gloria.