Se nota que había ganas de 'Lost Ark'. El MMO de Smilegate y Tripod Studios, traído a Occidente por Amazon, lleva desde su lanzamiento siendo un éxito en todos los sentidos, tanto a nivel de jugadores simultáneos como espectadores en Twitch, y la cosa no parece estar cerca de desinflarse, más bien todo lo contrario.
Desde Xataka hemos tenido ocasión de echarle el guante al juego y, si bien es cierto que todavía nos queda mucha Arkesia por recorrer, muchos bosses que derrotar y muchas cosas por conseguir, hemos querido recopilar tres cosas que, hasta el momento, nos han gustado y otras tres que no tanto. Sin más dilación, comenzamos.
Comenzamos con lo que más nos ha gustado. Lo primero es que de 'Lost Ark' te puede gustar más o menos su estética o su perspectiva asimétrica, pero es una realidad que es un MMORPG con todos los ingredientes necesarios para conquistar a los aficionados del género.
El juego tiene su propio lore, una historia principal (que no es la mejor y, realmente, es una excusa para conocer las mecánicas y subir de nivel), mazmorras de diferentes niveles, modo PvP (jugador contra jugador), creación de fortalezas, navegación marítima (que es casi un juego en sí mismo) y, en definitiva, un endgame que apunta maneras.
Una de las claves de cualquier MMORPG es que siempre haya cosas que hacer.
Una de las claves de cualquier MMORPG es que siempre haya cosas que hacer, objetos que farmear, equipo que subir de nivel y, en definitiva, esa sensación de progreso y mejora. 'Lost Ark' consigue ofrecer esto sin mayor problema y, a falta de llegar más a fondo en el juego, tiene todas las papeletas para dar una experiencia buena a jugadores más casuales y a los más hardcore.