Desde el 7 de octubre de 2023, la frontera que separa Israel y Líbano es un polvorín a punto de explotar. Semana tras semana ha ido aumentando la tensión, la población ha emigrado a otras zonas y el intercambio de ataques y proyectiles a uno y otro lado de la \'blue line\' –como se conoce la línea divisoria entre ambos países– ha sido constante; hasta llegar a la situación de conflicto actual que hace temer una vuelta a la guerra del año 2006.Mientras, más de 10.000 militares de Naciones Unidas permanecen desplegados en territorio libanés intentando contener la tensión. Todos ellos están liderados por el general español Aroldo Lázaro , que asumió el mando de la misión Unifil en febrero de 2022 y hace menos de un mes fue refrendado en el cargo de manera extraordinaria hasta agosto de 2025. España ostenta además el mando del sector este, con su cuartel general, en la base Miguel de Cervantes, ubicado cerca de la localidad Marjayoun. Allí trabajan diariamente unos 650 militares españoles que se dedican a patrullar la frontera, ayudar a la población local –ahora la poca que queda en la zona– y mantener interlocución con todos los actores. El pasado mes de mayo el peso de la fuerza fue asumido por la brigada Aragón del Ejército de Tierra, al mando del general de brigada G uillermo Pablo García del Barrio Díez .El nivel de alerta es máximo desde que la tensión aumentó y ha obligado a las fuerzas españolas y del resto de naciones que forman parte de la misión a pasar parte de su tiempo refugiados en búnkeres. Fuentes del Estado Mayor de la Defensa (Emad) aseguran sin embargo que los militares españoles «siguen desarrollando su labor». Pese a ello, sí que se han incrementado las medidas de seguridad, teniendo además en cuenta que durante los últimos meses algunos de los proyectiles lanzados desde Israel han alcanzado vehículos de Naciones Unidas e incluso herido a alguno de sus integrantes, ninguno español.Noticia Relacionada estandar No Hizbolá anuncia la muerte de un segundo alto mando y otros trece miembros en un bombardeo israelí en suburbio de Beirut ABCLas Fuerzas Armadas están desplegadas en Líbano desde el año 2006 y durante este periodo han fallecido en el país 16 soldados españoles. Nueve de ellos lo hicieron víctimas de causas naturales o accidentes de tráfico, mientras que seis miembros de la Brigada Paracaidista fallecieron en un atentado perpetrado con un artefacto que explotó al paso del vehículo en el que viajaban en el año 2007. Además, el cabo José Manuel Soria murió por un proyectil israelí cuando hacía guardia en uno de los puestos de la frontera. Fue en concreto en una garita de vigilancia de la posición 4-28 de la misión de Naciones Unidas, que sigue actualmente bajo mandato español.Naciones Unidas no revela cuál puede ser el futuro de la misión ante un aumento de la violencia. Desde España se remiten al organismo internacional pero recuerdan que la operación ha sido recientemente renovada para los próximos doce meses. La ONU por su parte hace constantes llamamientos a una contención de la tensión , el cumplimiento de la resolución 1701 (2006) del Consejo de Seguridad y el general Lázaro ha multiplicado su versión diplomática para hacer de mediador entre todas las partes. Eso sí, las Fuerzas Armadas recalcan que siempre trabajan con planes para todo, incluida una eventual necesidad de evacuación urgente. «En todas las misiones y operaciones en las que participa personal español están previstos planes de emergencia y evacuación para solventar cualquier situación que pueda presentarse», aseguran desde el Estado Mayor.