Por segunda vez en la semana, en medio de la polémica por el desdoblamiento de las elecciones bonaerenses, Mauricio Macri y María Eugenia Vidal volvieron a mostrarse juntos.

 

Si el encuentro del miércoles, con motivo de una recorrida en obras viales en Suipacha, había generado expectativa por tratarse de la primera actividad que compartieron en el año; la visita trazada bajo un fuerte hermetismo en Ezeiza alimenta más las versiones.



Para evitar a la prensa y fotos incómodas, Presidencia no incluyó la recorrida por el Centro Recreativo Nacional, en Ezeiza; entre su agenda oficial.

 

La única actividad que figura allí es la reunión que trazó -a las 10- con la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich; otra de las figuras macristas sobre las que se reforzaron las miradas cada vez que se reúne con el Presidente desde que comenzaron las versiones que puede acompañarlo en la fórmula para la reelección.



Casualidad o no, Macri sumó a la recorrida de esta mañana a la ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley; otra de sus funcionarias que suena para ir de candidata a vicepresidenta.

 

Con todo, la segunda “cumbre” Macri-Vidal no arrojó más condimentos que desde lo simbólico ya que por el momento decidieron no hablar sobre el desdoblamiento. Más: al igual que el miércoles, cada uno llegó por su lado y por cuestiones climáticas la recorrida, por el centro que la provincia acondicionó con actividades gratuitas veraniegas para los chicos, fue limitada. Y no estuvieron a solas en ningún momento, ya que tuvieron que moverse en la combi junto al resto de los funcionarios que los acompañaron.

 

Vidal estuvo acompañada por dos de sus soldados más fieles, el secretario de la gobernación, Fabián Perechodnik; y el subsecretario de Asuntos Municipales, Alex Campbell.



El único ajeno a Cambiemos fue el “anfitrión”, el intendente de Ezeiza, el peronista Alejandro Granados.

 

Luego, ambos se sentaron junto a un grupo de chicos que desayunan todos los días en el lugar y posaron para la foto.

 

Del desdoblamiento, confiaron fuentes oficiales, comenzarán a hablar recién en febrero, cuando el asesor estrella del Presidente, Jaime Durán Barba dé su opinión al respecto ante la cúpula de campaña del PRO.



Por lo pronto, cerca de Vidal comienzan a admitir ciertas dudas respecto a la conveniencia del desdoblamiento. El jefe de Gabinete, Marcos Peña; y hasta el ala política del Gobierno; tampoco se muestran demasiado convencidos. “Pero todavía no va a haber una definición. Hay que evaluarlo en profundidad”, confiaron las fuentes.