Mujeres de hoy

Me fui a las carreras de Ascot convencida que de me iba aburrir y ha sido lo mejor del año

Longines quiso invitar a TELVA a pasar un día en Ascot y, vivirlo, además, como una experiencia única, dándonos acceso a zonas casi exclusivas para la familia real británica. Pero, comencemos por el principio y, quizá más importante para una editora de moda: ¿cómo preparar el look para un evento así?

Así se viste en Ascot

Carole Middleton, la madre de Kate Middleton, con Eugenia de YorkGettyimages

Adjunta a la invitación de la firma, había un estricto código de vestuario que hay que tener en cuenta y que se vigila desde la misma entrada al hipódromo. Más si cabe si vas a la zona "Royal".

Para las mujeres es necesario, no solo un vestido o falda que llegue más abajo de la rodilla, sino también otros detalles a tener en cuenta. Los tirantes estás permitidos solo si miden más de 2,5 centímetros de ancho y, por supuesto, piden chal o chaqueta para tapar los hombros. Se permiten también jumpstuis (monos largos), un traje de chaqueta de pantalón y, por supuesto, resulta indispensable un tocado con una base de al menos 10 centímetros. De calzado nada al respecto, por lo que las alpargatas están permitidas.

Sabiendo, además, que las inglesas son expertas en el arte de vestir de invitadas, el reto era doble. Confieso que tras ver y escribir muchos años sobre el estilo de Kate Middleton, ella fue mi inspiración para mi look

Vivir Ascot como una royal

La princesa Ana junto a Zara TindallGettyimages

Aunque las carreras de caballos son la excusa (y qué excusa más espectacular, por cierto), a Ascot uno va a ver y a dejarse ver. Los caballeros con sombrero de copa, ellas con tocados increíbles y esos vestidos estampados que las han hecho famosas en todo el mundo. Nadie domina el código de un vestido de té como una británica. Traspasar las puertas de Ascot es como traspasar una puerta en el tiempo. Quizá el secreto de su éxito mundial es su estricta manera de mantener la tradición.

Asistir a Ascot, como a cualquier otro evento, depende de tu presupuesto. Desde el propio parking, ya hay personas que se reúnen a hacer un picnic y disfrutan del ambiente. E incluso ahí, el código de vestimenta se respeta y las mesas se visten con manteles de lino y con jarrones con flores frescas (Resulta increíble verlo).

Una vez en el interior y antes de entrar en el propio hipódromo, existen zonas para comer, tomar una copa de champán o más tarde el té. Algunas son privadas, en otras, todos los invitados pueden hacerlo. Lo mismo que disfrutar de las carreras, que se suceden cada media hora, y se pueden seguir a pie de pista. Los palcos son exclusivos y privados y para acceder a ellos, vuelven a pasar revista a tu look para que se respete el código de vestimenta ya que ahí ya puedes cruzarte en cualquier momento con algún miembro de la familia real.

Pero, para dar comienzo a la jornada, a las 14 horas tiene lugar la procesión real en la que siempre debe haber algún miembro de la familia real. En nuestro caso, el día 2 en Ascot, contamos con la presencia del príncipe Guillermo y la reina Camila, además de la princesa Ana, y Beatriz y Eugenia de York.

Sobre el arte de apostar y codearte con la princesa Ana

Sarah Ferguson y Lucy van Straubenzee en Ascot.Gettyimages

Longines, como patrocinador oficial de Ascot (con ellos se cronometran todas las carreras) cuenta con un palco central para ver las carreras de forma privilegiada y donde alternan clientes, periodistas y celebrities. En nuestro caso, compartimos zona con Regé-Jean Page, el apuesto duque de la primera temporada de Los Bridgerton.

Para apostar, puedes pedir los sabios consejos de ex-jinetes y profesionales del sector que saben quiénes son los favoritos de cada carrera, el linaje de cada caballo y sus posibilidades reales. Es parte del ambiente de Ascot.

También acercarte a la zona donde se entregan los premios y donde los jinetes, comparten charlas con propietarios de caballos y la familia real, una zona exclusiva a la que Longines nos dio acceso para, por ejemplo, contemplar algunos de los caballos junto a la princesa Ana, que no se perdía detalle de cada uno.

Mi look en Ascot

Si ya me resulta muy difícil vestirme de invitada, vestir para Ascot me resultó un auténtico reto. Confieso que, desde fuera, se ve más difícil de lo que es. Había invitadas ideales con una falda midi de Zara con vuelo y una blusa de estilo romántico, por ejemplo.


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Fuente:https://www.telva.com/moda/looks/2024/06/20/6673bb4302136e714f8b4590.html

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