El expresidente ruso y actual vicepresidente del Consejo de Seguridad del país, Dimitri Medvedev, denunció este martes que «líderes europeos» intentan «intensificar» el conflicto en Ucrania a raíz de la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales celebradas la semana pasada en Estados Unidos y que «el objetivo es llevar el conflicto con Rusia a una fase irreversible», antes de especificar que la OTAN apuesta por combatir de forma más activa, publicó en Telegram.
Medvedev ha rechazado además el «ultimátum» del líder opositor alemán y posible próximo canciller, Friedrich Merz, sobre la posible entrega a Kiev de misiles Taurus y ha explicado que estas declaraciones «tienen una naturaleza electoralista».
Agregó «está claro que estos misiles no pueden cambiar nada de forma significativa en las acciones militares», ha dicho el expresidente ruso, quien ha adelantado que «su entrega sólo prolongaría la agonía» de las autoridades ucranianas.
Sin embargo, ha advertido de que «el riesgo de que el conflicto aumentara de intensidad y llegara a su fase más peligrosa» también aumentaría en caso de que haya ataques contra territorio ruso con misiles de crucero entregados a las Fuerzas Armadas ucranianas por parte de socios de Kiev.
Medvedev señaló que las lecciones de la Segunda Guerra Mundial «han dejado de funcionar» y ha lamentado que «los líderes europeos con experiencia y simplemente inteligencia han quedado en el pasado». «Ahora no tienen personalidad, pero sí una alta autoestima, por lo que el peor escenario sigue siendo el más probable», ha zanjado.
Tras el triunfo en la elecciones presidenciales, Donald Trump dijo en su primera declaración pública que durante su anterior mandato «no hubo guerras, al margen de derrotar a Estado Islámico en un tiempo récord». «Dicen que voy a empezar una guerra, pero no voy a hacerlo. Voy a detener las guerras», añadió «Vamos a mantener nuestras promesas».