Norma, madre de Ricardo Figueroa, el joven baleado el pasado sábado por motochorros cuando fue interceptado para robarle y que tras recibir un disparo que le perforó el intestino, lucha por su vida en el Hospital Escuela, contó detalles de su estado actual. “Lo poco que sabemos es que le cerraron la herida, paró el sangrado; se encuentra estable y estamos esperando a ver como reaccione su cuerpo”, puntualizó respecto a la evolución del hombre, desestimando por ahora el pedido de dadores de sangre “estamos esperando ver si ingresa nuevamente al quirófano”, indicó la mujer.

Ricardo Figueroa, joven de 32 años, permanece hospitalizado en las instalaciones del Escuela desde el pasado sábado tras ser atacado por motochorros y recibir un disparo. Según contaba ayer Mariela, pareja del trabajado "la bala que le dispararon los delincuentes ingresó por la cadera, le perforó el intestino y ocasionó que perdiera mucha sangre".

En la jornada de este martes, el cronista de Sudamericana pudo dialogar con Norma, madre de Ricardo quien expresó respecto al estado de salud, "Lo poco que sabemos es que le cerraron la herida, paró el sangrado; se encuentra estable y estamos esperando a ver como reaccione su cuerpo".

Señaló además que, "producto del disparo, tiene siete perforaciones en el intestino que se presume sería por el astillamiento de las costillas tras el impacto del proyectil".

Por otro lado, como parte de este dramático momento que atraviesa la familia, comentó que Rodrigo es papá de una nena de 8 años. "Ayer la mamá le contó lo que le sucedió a su papá, es muy triste porque cada año arman juntos el arbolito de Navidad. Tiene que recuperarse, tiene una nena de 8 años que lo está esperando", expresó la mamá del joven.

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