El comerciante observó que estaban por asaltarlo y, con el arma que tenía en su negocio, los ejecutó. No fue detenido porque la justicia consideró que actuó en legítima defensa.

La inseguridad sigue golpeando con fuerza al pueblo mexicano. Un ferretero de la localidad de Puebla, en México, estuvo a punto de ser víctima de un robo pero cansando de estos hechos delictivos decidió hacer justicia por mano propia antes de que esto sucediera y ejecutó a los ladrones a balazos.

Dos delincuentes intentaron robarle al comerciante en su propio negocio, sin embargo, tras advertir que llegaban en moto con esas intenciones, el hombre sacó una pistola de 9 milímetros que guardaba dentro de su tienda para estos casos, les disparó y terminó con la vida de ambos asaltantes.

Inseguridad en Puebla, México

Todo ocurrió en un comercio de la localidad de Puebla, en México. De acuerdo con las investigaciones realizadas, los dos motochorros llegaron al local y se encontraron con el dueño de la ferretería, quien reaccionó de tal manera tras darse cuenta que le querían robar.

Tras advertir estas maniobras en los delincuentes, el comerciante les disparó a ambos, lo que provocó la muerte instantánea de uno de ellos, mientras que el otro huyó, pero al instante falleció sobre la vereda.

En ese contexto, los policias que investigaron el caso encontraron un arma tumbera que pertenecía a los delincuentes y se pudo constatar que el accionar del ferretero fue en legítima defensa, por lo que no fue detenido ni se levantaron cargos contra él.

La fiscalía general de Puebla, comenzó con las primeras diligencias y están a la espera del resultado de las autopsias de los cuerpos de ambos motochorros.
Inseguridad en Castelar: un hombre quiso defender a una vecina de un robo y los delincuentes le dispararon sin piedad

El miércoles pasado, la localidad de Castelar fue el blanco de al menos 3 delincuentes armados que asaltaron impunemente a un vecino de la zona robándole su camioneta junto con materiales imprescindibles de trabajo que guardaba en el vehículo.

Un hombre del barrio que iba en su auto junto a su mujer vio la situación, quiso ayudar y trató de defender a su vecino, pero lo único que logró fue que se abriera una balacera contra él: le dispararon incontables veces y 2 de esos proyectiles impactaron en el vidrio frontal del auto a la altura de la cabeza y de milagro, no penetraron.