El veterano exentrenador del "Xeneize" brindó una charla a estudiantes de periodismo donde se refirió a su polémica salida del club por los malos resultados y al hecho de que Battaglia asuma en su lugar.

Miguel Ángel Russo rompió el silencio en las últimas horas después de lo que fue su tensa salida de Boca. A tres semanas de ser despedido, el DT habló ante más de 150 estudiantes de Isec, una institución oficial terciaria orientada a la formación en carreras vinculadas al periodismo y a la locución, entre otras.

"Estoy agradecido a las autoridades del club por la oportunidad que me dieron y no tengo más que los mejores deseos para el futuro", se limitó a decir Russo sobre la interrupción de su contrato y su salida del club.

El Consejo de Fútbol de Boca y Juan Román Riquelme que le pusieron punto final al ciclo tras quedar eliminado en los octavos de final de la Copa Libertadores y tener una racha de diez partidos sin poder ganar (llegó a la marca de 599 minutos sin convertir tantos), estas últimas dos marcas negativas históricas en el club.

"Con Sebastián (Battaglia) hablábamos constantemente por cuestiones relacionadas al club, las charlas siempre fueron positivas. Román (Riquelme) entendía todo a la perfección además tenía el plus que jugaba para el equipo de sus amores", aseguró Russo sobre su sucesor en el cargo.

En cuanto a su futuro profesional, el experimentado entrenador fue tentado para dirigir a Venezuela, el último en las Eliminatorias Sudamericanas rumbo al Mundial de Qatar 2022, aunque prefirió tomar otro camino: "Obvio que estar en una selección es lo máximo y seduce pero el tiempo dirá, estoy disfrutando de mis amigos, familia y charlas futboleras".