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Mosab H. Yousef : «Palestina no existe: Sin Israel como enemigo se matarían entre ellos»

Hijo de uno de los fundadores de Hamás , Mosab Hassan Yousef (Ramala, 1978) ha vivido dos vidas. Una como palestino y otra como no palestino. Un cuarto de siglo en cada lado, de modo que sabe de lo que habla. La primera le llegó por imposición, a la segunda viajó por convicción. Hoy es uno de los principales enemigos públicos de Hamás , la organización terrorista en la que se infiltró durante diez años y que hace casi un año superó todas las líneas de la civilización al perpetrar el 7 de octubre el atroz ataque terrorista contra civiles que ha desencadenado una guerra de imprevisible final. Y Yousef, hombre educado aunque seco, se ha convertido en una voz valiente no solo contra esta organización terrorista, sino contra el concepto de victimización que, en su análisis, lo inunda todo.Yousef no aparta la mirada. Ojos oscuros, barba perfectamente poblada. Delgado y estiloso, en su cabello empiezan a irrumpir tímidamente las canas. Escucharle es sencillo, porque rebosa convicción y alberga la virtud del buen orador, sobre todo cuando te observa de arriba abajo. La gesticulación acompaña, en especial cuando es la mano izquierda la que refuerza el argumento, y esto es simbólico. Esta semana ha visitado Madrid para explicar por qué en un momento de su vida decidió rechazar la causa que le vino dada y hoy es una voz única sobre el discurso dominante en la escena internacional, y muy en particular en el Gobierno de España: la necesidad de los dos estados , los palestinos como víctimas, Israel país genocida y colono, etcétera. Mosab acude a la raíz del problema, al origen, y no es fácil, porque su padre está en una cárcel israelí. Él quiere remover conciencias. Y el que la hizo la paga, sea quien sea.Noticia Relacionada estandar Si El conflicto en Oriente Próximo alienta a los \'lobos solitarios\' en Europa Rosalía Sánchez | Corresponsal en Berlín Alemania está en el punto de mira de los yihadistas y su propaganda, según el Centro Soufan, grupo de expertos centrado en la seguridad globalGracias a la invitación de NEOS, el pasado jueves ABC pudo escuchar una conferencia restringida en Madrid antes de entrevistarse con él. El auditorio estaba a rebosar porque lo verdaderamente disruptivo de Mosab Hassan Yousef no son sus opiniones, que las tiene, sino los argumentos que le han llevado a ser un caso único: «Palestina no existe, nunca ha existido». ¿Qué es Palestina?, pregunta ABC. «Esto es la mayor pregunta de todos los tiempos. Mucha gente cree que es un país, una raza, un grupo étnico, pero en realidad Palestina no existe. Veo muchos historiadores, filósofos, incluso científicos que caen en la trampa. Si echamos un vistazo atrás en la Historia, hubo una Palestina, una creación del Imperio británico: que duró 25 años y fue una entidad colonial que nació por el colapso del Imperio otomano. Esto es un hecho: no es propaganda. Y mucha gente no quiere aceptar la sencilla verdad». Negada pues la existencia de Palestina, la siguiente pregunta es qué es ser palestino. Yousef pone el ejemplo de la infancia «turbulenta» en la que nació y vivió bajo esta premisa: «Si vas a un \'checkpoint\' y mueres eres un mártir, todos debemos morir por Palestina». «Con todos los datos que desafían toda la propaganda yo digo que es una ideología violenta que depende de la destrucción de lo que sí es real: Israel. Palestina no tiene sentido, pero muchos pensábamos que éramos palestinos porque había un país. Muchos años después yo me di cuenta de que no existía. Preguntadles qué es Palestina, qué te hace a ti ser palestino. No lo saben. Preguntad, en cambio, a los judíos qué les hace ser israelíes y pueden escribir libros, porque son un pueblo».Y aquí llega Yousef a lo más profundo de su crítica: «Un palestino es una idea mental, es ser dependiente, depender de los demás sin poder crear». Aquí irrumpe el motor de su argumento: «Yo no quiero presentarme como un héroe o un salvador, porque eso exige que haya víctimas y yo no quiero presentarme como una víctima. Tuve una infancia muy turbulenta, no fue una infancia fácil, pero esto no significa que no podamos recuperarnos o ser más fuertes». Mosab rechaza esa idea, quiere «revertir ese trauma» de origen, al igual que esa otra según la cual están condenados a ser «dependientes de la comunidad internacional». «Tampoco me gusta», añade antes de lanzar una frase «que puede malinterpretarse»: «elegir ser un palestino es un poco patético. Todo el mundo tiene el mismo potencial. Si vas a Cisjordania tienen el mismo sol, la misma tierra, el mismo dios que les permite crear lo que Israel ha creado. ¿Qué se lo impide?».Es aquí donde irrumpe la mayor crítica a las organizaciones palestinas, de Hamás a la Autoridad Nacional Palestina o Al Fatah : «Les da igual Palestina, y si se la das no saben qué hacer con ella. Palestina es como un agujero negro, que se puede tragar una galaxia entera porque nada lo satisface. Si no hay un enemigo común, que en este caso es Israel, se matarían entren ellos». Yousef les reprocha que no sean capaces de crear nada en su territorio, de regocijarse en su victimismo y de tener una única motivación que conduce al adoctrinamiento de la población y a los asesinatos indiscriminados: «La gente celebraba en Ramala cuando había personas que estallaban por los aires. Mientras ellos sufran está bien: esa es su mentalidad. Estaban de acuerdo en infligir ese mal».El camino desechado por los palestinos «Elegir ser un palestino es un poco patético. En Cisjordania tienen el mismo sol y la misma tierra que les permite crear lo que Israel ha creado. ¿Qué se lo impide?La pregunta es obligada: ¿es usted un propagandista de Israel? «Yo no soy un palestino, ni un israelí y sólo me represento a mí mismo. He tenido amistad con el pueblo judío en los últimos 27 años. Conozco las dos culturas. Ojalá aquellos que viven en la oscuridad quieran ver la luz». ABC insiste: ¿es lo mismo Hamás que la ANP? «Quienes hacen esa diferenciación quieren que entremos en esta madriguera sin salida que no termina nunca. A quienes no hayan vivido allí yo les animo a vivir en esa sociedad un mínimo de diez años para entender esa cultura, para que entiendan que no hay una diferencia entre Hamás y la Yihad islámica».Matar al padreMosab recuerda su infancia, y los argumentos de su padre: «Me hablaba de un monstruo que llegaba del mar y los describía con entusiasmo y ese eslogan romántico entre el río y el mar, las víctimas de los invasores y vendía que Israel es una entidad colona, cuando ellos son los que tienen pruebas sobre la identidad de ese terreno. Hamás se convence de que tienen el derecho de matar a la Humanidad de forma indiscriminada y eso es la organización de mi padre. Han estado matando a gente de forma indiscriminada, no solo el 7 de octubre. ¿Y los atentados suicidas? Su objeto eran colegios, hospitales, sinagogas, clubes, playas: todo el mundo era un objetivo. Tuve que tomar una decisión. El discurso de Mosab Hassan Yousef avanza sin fisuras. Niega toda legitimidad a la causa palestina, incluso la de quien fue uno de sus referentes, Yasir Arafat , que fue Nobel de la paz. «Un día mi padre me contó que tenía una reunión con Arafat y le acompañé: estaba Arafat con todas las facciones, y Mahmud Abbas (que esta semana ha estado en Madrid con Pedro Sánchez) , estaba en esa reunión: la decisión de la mayoría de todas las facciones fue la de volver a los atentados suicidas y Arafat lo aprobó. Esa fue la primera información que yo le di a Israel. Ariel Sharon no se lo podía creer, pero estamos hablando de gente que está de acuerdo con la violencia y predica con la violencia». Mosab dice que no entiende porque la ANP no ha condenado los atentados del 7 de octubre: «Son iguales. Hamás ha matado a miembros de Fatah. No entiendo como la ANP no ha condenado a Hamás por el 7 de octubre. Lo que han hecho ha sido intentar deslegitimar a Israel . No hay diferencia entre Hamás y ANP. Es una cultura de la muerte y nada les puede satisfacer: es muy similar a la ideología nazi». Son cómplices de las fuerzas del mal que intentan destruir la civilización. Y aquí viene la traca final del discurso de Mosab: niega que haya un apartheid palestino y niega la limpieza étnica: «han crecido de 100.000 a 5 millones». Niega el genocidio: «La guerra no es de religión, es contra Hamás , y a los civiles se les ha avisado que evacuen para poder minimizar las bajas. ¿Cómo puede ser un genocidio? ¿Qué más puede hacer Israel en una guerra contra el enemigo? Han revertido la narrativa e Israel se convierte en el autor del genocidio y los palestinos en las víctimas«. Pero Mosab se niega a aceptar que es una víctima y exige justicia, a pesar de que su familia, y en particular su padre, están en el otro lado de una línea que él traza entre el bien y el mal: »Los que gritan Palestina libre son cómplices de un delito, han validado a Hamás y la violencia. ¿Pero cuál es el límite? Han estado matando a civiles de forma indiscriminada, sus acciones son malas, han cometido un delito capital y deben ser castigados. Yo no puedo justificar el asesinato de civiles inocentes, el secuestro de niños…».¿Y España? O más preciso: ¿y el Gobierno de España? «Quizás vuestro presidente es propalestino y quizás es su naturaleza ser un antisemita por reconocer el Estado palestino: ¿Él cree que puede obligar al Estado de Israel a poner en riesgo su seguridad? ¿Quién cree que es para imponerse a otra democracia? No saben de lo que hablan, son payasos y espero que todos ellos vayan al infierno».¿Y la solución de los dos estados ? «Imagina si el presidente español decide dar Andalucía a Abbas y dice que históricamente es una tierra islámica y crea Palestina ahí y que la capital sea Córdoba. Si realmente eres tan generoso, ¿por qué no das parte de tu país?».Mosab es severo con Sánchez porque no comprende que se haya reconocido el Estado palestino antes de sacar a Hamás del poder. «Al hacerlo, legitima a los violentos y automáticamente invita a la violencia en su propia casa. Mañana los islamistas que están aquí en Europa van a decir que Andalucía es una tierra islámica y la reclamarán (…). ¿Hacia dónde se dirige Europa? No quiero ver a las mujeres llevando un burka. Si no los detenemos, será una invasión». Mosab explica que el Estado árabe tuvo la oportunidad de establecerse, pero nunca fue su interés, que era destruir el Estado de Israel . Si su objetivo fuera tener un Estado palestino lo tendrían ya, pero prefieren ser la mafia global, chantajeando a las superpotencias para recibir más fondos y, en su interés, el conflicto continúa. La comunidad internacional ha cedido a este chantaje. ¿Por qué se premia a estos criminales?».Una última apelación: «Todos los pueblos civilizados estamos en el mismo barco, debemos mantenernos unidos y rechazar esta ambición islámica que podemos llamar Palestina ». ¿Y su padre? «No hay excepciones. Es un delito capital y es la pena capital. Quiero que el Estado israelí siga determinado hasta la victoria. Ese tipo de salvajes no tiene derecho a estar entre nosotros. Hamás no puede salirse con la suya».

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