El Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) reportó esta semana un nuevo retroceso en el nivel de consumo registrado en supermercados y autoservicios mayoristas de distintos puntos del país. Los descensos marcan que el tan anunciado repunte que comunican las autoridades nacionales aún está lejos de llegar al bolsillo de la población.

El Indec informó este martes que las ventas en supermercados cayeron 12,8% interanual en septiembre pasado y acumularon una baja de 11,6% en los últimos nueve meses. El dato empeora si se tiene en cuenta que también hubo una caída intermensual de 0,4% en relación a agosto.

Asimismo, el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos comunicó que las ventas en autoservicios mayoristas se desplomaron 21,7% interanual en el noveno mes del año, lo que acumula una contracción de 14,4% en las últimas nueve mediciones.

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En este segundo caso también se mostró un descenso intermensual de 0,8%, que reflejó que el consumo no encuentra todavía su punto de rebote, a pesar de las reiteradas expresiones oficialistas que hablan del fin de la recesión económica.

Estos informes oficiales tienen otro indicador que permite leer el estado de situación. Según expusieron, la proporción de las ventas -medidas a precios corrientes- abonadas con tarjeta de crédito en septiembre incrementaron notoriamente en ambos puntos de comercialización.

Dato del Indec publicado en el relevamiento de ventas en autoservicios mayoristas.

Dato del Indec publicado en el relevamiento de ventas de supermercados.

A inicios de noviembre, el presidente Javier Milei disertó en el acto por los 100 años de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC) y aseguró que “la recesión terminó y el país finalmente ha empezado a crecer”.

“Cuando asumí el mando presidencial en diciembre, les advertí que para sacar al país de la miseria en la que lo hundió la casta política íbamos a tener que atravesar primero un intervalo duro, de esfuerzo y dolor, pero hoy la recesión terminó, estamos saliendo del desierto y el país finalmente ha empezado a crecer”, planteó ese 7 de noviembre.

No obstante, ningún indicador ligado al consumo arrojó desde entonces alguna pista que permita divisar un alivio para el bolsillo de la población, sino todo lo contrario. Tanto las mediciones oficiales como las privadas exponen el derrumbe del nivel de vida.