El titular de la Universidad del Sol y rectores de otras casas de estudios del país se reunirán el 6 de octubre con Sergio Massa para intentar acercar posturas respecto al Presupuesto 2023. Están garantizados los salarios y, con financiamiento externo, dos grandes obras.

El 1 de julio de este año, Gerardo Omar Larroza asumió como rector de la Universidad Nacional del Nordeste (UNNE) para el periodo 2022–2026, tras resultar electo en la Asamblea de dicha institución, sucediendo en el cargo a la profesora María Delfina Veiravé.

A dos meses de estar al frente de dicha administración, la situación presupuestaria, con vistas al ejercicio 2023, se convirtió en uno de los temas de agenda, debido a los recortes estipulados por el Ejecutivo nacional, que afectarían a la ejecución de una serie de proyectos ambiciosos que plantea la flamante gestión.

Larroza, quien además fue decano de la Facultad de Medicina por dos periodos, dialogó con República de Corrientes respecto a las proyecciones financieras y académicas de la casa de altos estudios.

-Hace unos días se instaló la cuestión de las afectaciones al Presupuesto 2023 para el sistema universitario y la UNNE en particular, ¿cuál es la principal preocupación?
-Hubo una propuesta del CIN (Consejo Interuniversitario Nacional) que fue una partida que se determinó como propuesta ideal, sin tener en cuenta lo que en los fondos de otros gastos implicarían los pagos de servicios. Por otro lado, fue la que se presentó como Presupuesto (nacional 2023), que difiere en un porcentaje importante.

Lo que aparecería como una alerta es la proyección que se tendría en el inciso de otros gastos, cuando se liberen los nuevos segmentos tarifarios (de energía), las universidades no tendrían previstos refuerzos presupuestarios ni alguna vía de excepción que pueda hacer frente a esa nueva perspectiva.

Ahí está la incertidumbre donde nos estaría manteniendo en alerta a todas las nuevas universidades. Estamos muy atentos a que pueda verse la necesidad de postergar el inicio de algunas nuevas estrategias, programas centrales, obras de infraestructura, seguramente se verán afectadas en partidas.

-¿Cómo es el pago de servicios en la Universidad?

-Las universidades pagan sus servicios como cualquier contribuyente, fundamentalmente en luz eléctrica, donde son altos consumidores. Pagan la factura plena, estipulada por las entidades de cada provincia, en nuestro caso por Corrientes, la DPEC, y por Chaco, Secheep.

-¿Pero las universidades tienen las tarifas subsidiadas?

-Los subsidios nunca fueron contemplados. Incluso fue controversial en otras gestiones, porque también se puso en discusión y hubo una interpretación de los subsidios en algunas figuras jurídicas, en las que las asociaciones civiles y clubes dejaron de pagar. Hubo casi un conflicto porque las universidades privadas no pagaban o accedían a esa vía de excepción.

Las tarifas en el sistema universitario siempre fueron un tema importante a la hora de poner en tela de discusión, y más en este caso, cuando se liberen los segmentos tarifarios de los subsidios en las provincias, que impactarán seguramente en el inciso de otros gastos.

¿La UNNE viene sufriendo recortes en los últimos años?

-La Universidad a lo largo de estos cuatro o cinco años fue disminuyendo en cuanto a porcentaje del presupuesto global. Hace cinco años estábamos en el
2,9 % aproximadamente del presupuesto general y hoy estamos en 2,26. Ese es también un punto de reparo que advertimos desde nuestros equipos técnicos, ya que hay otras universidades como Buenos Aires, Rosario, Litoral, que también tuvieron disminución en términos porcentuales. Otras que son chicas o medianas sí fueron incrementándose por encima del crecimiento natural que tiene el presupuesto.

-¿La presencia de otras universidades públicas en Chaco o proyectos para crearlas en Corrientes afectaría el presupuesto de la UNNE?

-A la UNNE no le afecta, no genera un perjuicio en el presupuesto. Sí vemos puntos dispares a la hora de la distribución porque se adiciona a la propuesta una partida para un Instituto Universitario en la provincia de Formosa de 460 millones de pesos. Son reforzamientos que aparecen en un segundo plano.

-¿Tiene previsto reunirse con algún funcionario de la Nación para hacer estos planteos?

-El 6 de octubre nos vamos a reunir los rectores de universidades con el ministro (Sergio) Massa y creo que ahí se expondrán estos lineamientos que ya los plantemos en otros ámbitos, tanto en la discusión del CIN como en el plenario, se han generado estas alertas. Creo que es muy atinado y responsable de parte del Ministerio de Educación y de Economía, que van a escuchar las propuestas y la problemática del presupuesto universitario.

Simplemente pusimos en alerta a los legisladores, por la capacidad que podamos tener en algunos otros beneficios que vienen adicionales, que tengan que ver en la planilla B (del Presupuesto General de la Nación) y en la distribución de obras u otras vías de excepción. Ese es el punto importante por el que estuvimos con algunos legisladores.

Me reuní con el diputado (nacional) Manuel Aguirre y de Chaco con legisladores del oficialismo y de la oposición. Tenemos previsto convocar a otros legisladores de Corrientes.

-¿Cómo piensan equilibrar o afrontar los proyectos que tenían en agenda con los fondos económicos que estarían disponibles?

-En principio, la idea es seguir sosteniendo los (proyectos) que venían con una dinámica propia, fundamentalmente aquellos que tienen que ver con bienestar estudiantil y los de estímulo de los investigadores, docentes y sueldos. Esos estarían garantizados.

Otros que demanden un grado de inversión como modernización, infraestructura en tecnología y grandes obras o mantenimiento edilicio estaremos expectantes, vamos a dejar latente o para algún esquema de financiamiento que podamos complementar, articular con otros actores, los gobiernos locales u otras fuentes de financiamiento que no permitan avanzar en estas tareas.

-¿Las universidades pueden firmar convenios con organismos internacionales?

-Sí, bajo garantía del Estado, ya sea con fondos reembolsables o también acceso a convocatoria de fondos no reembolsables. En esto último se puede acceder tanto de forma bilateral como multilateral.

Por eso estamos en la búsqueda de ese tipo de financiamiento, como también otros que tengan que ver con las asociaciones estratégicas del sector productivo privado, articulación con consorcios con los que se pueda trabajar con esquemas específicos de interés.

Hay varias estrategias para complementar el presupuesto universitario, que no solamente tiene que ver con las partidas que provee el Estado, sino con otros actores que se puedan sumar.