Las autoridades correntinas mantienen silencio respecto al recorte nacional de fondos para la protección a bosques nativos. Más recursos que no llegarán a las provincias. A Misiones por los últimos dos años, se le adeuda $600 millones y ya hubo quejas desde ese distrito.



El gobierno de Javier Milei eliminó el Fondo Fiduciario de Protección Ambiental de los Bosques Nativos (Fobosque), “creado en su momento para la protección de los bosques en el marco de la contribución nacional presentada por la Argentina al Acuerdo de París y mejorar la eficiencia y transparencia en la administración y ejecución de los montos destinados a la conservación de estos ecosistemas en el país”, resumieron desde la Fundación Ambiente y Recursos Naturales (Farn). Por la eliminación de los fondos, renunció el director Nacional de Bosques.



Respecto a los fondos acumulados a través del fideicomiso eliminado ahora, la Nación a la fecha, lleva acumulados unos 14 mil millones de pesos sin rendir. Observó que “si por razones administrativas no se llega a ejecutar y tras plantear que los fondos del Estado registran una subejecución muy grande, los fondos de bosques se van a perder”.



Como ocurrió con otros recortes y paralizaciones de obra pública por parte del gobierno libertario, por ejemplo: en diciembre de 2023 la paralización de la construcción de Añá Cuá y 450 obreros despedidos, el gobierno de Corrientes optó y sigue en esa línea de mantener silencio. No quejarse.



Autoridades del área de conservación de la provincia de Misiones explicaron ayer que a ese distrito se le adeuda unos 600 millones de pesos que son las partidas 2023/2024. “Con esos 600 millones de pesos sería poco, pero la provincia podría mejorar, por ejemplo, el apoyo para que los propietarios de bosques nativos desarrollaran planes de gestión forestal sustentables y la industria maderera del bosque nativo mejorar modelo de sustentabilidad y desarrollo local o apoyar a propietarios de reservas privadas para el desarrollo turístico”, explicó un funcionario misionero.



Detalló que como generalmente las provincias están demoradas en la rendición de los fondos que han recibido en años previos, esos fondos se salvaguardaban en este fideicomiso que hoy se ha disuelto.“Esa salvaguarda implicaba que quedaban a resguardo de la inflación. De hecho, generaban algún tipo de rendimiento financiero, y a su vez permitían que, aún terminado ese año de ejercicio, no se reasignarán a otras actividades en el presupuesto nacional, sino que quedarán salvaguardados hasta tanto las provincias estuvieran en condiciones de recibirlo”.



Agregó que tal situación venía ocurriendo “con los fondos 2023 que eran algo así como 9.000 millones de pesos. Hoy el fideicomiso tiene alrededor de 14 mil millones de pesos, productos de los intereses y remanentes que había”.