El gobierno provincial parece querer salir del prolongado conflicto docente con algunas medidas que tiendan a impulsar la actividad económica provincial. La inyección de fondos que promete la administración chaqueña, en cierto modo, explica el empecinamiento del Ejecutivo en no cumplir no solamente en tiempo y si no tampoco en forma con la deuda que mantiene con los maestros, correspondiente el año 2020.

A un altísimo costo para las principales organizaciones sindicales que nuclean a los docentes, Jorge Capitanich volvió a dar la cara en estas paritarias para anunciar el acuerdo. La forma de acto público, innecesaria cuando toda la negociación fue delegada a su ministro estrella, Santiago Pérez Pons, sirvió sólo para crispar los ánimos.

La situación ya estaba caldeada, lo vivió el gobernador en un acto en Colonia Elisa y también el ministro de Economía que tuvo que suspender una visita a los estudios de Canal 9 por temor respecto de su propia seguridad. También los edificios de UTRE y ATECH que sufrieron escraches de parte de los docentes que se manifestaron para repudiar el acuerdo.

El nuevo Capitanich viene de inaugurar viviendas con Emerenciano Sena, en el barrio que lleva el nombre del piquetero ultraoficialista y de pedirle a los movimientos sociales que encuentren otra forma de manifestar sus reclamos, que no sea el habitual corte de calles o rutas.

Definitivamente la relación con los sectores que lo llevaron dos veces a la Casa de Gobierno no es la misma, incluso se lo recordaron algunos dirigentes y ex funcionarios de la primera etapa del gobierno del PJ -tras el interregno radical- como Jorge Franco, pero hace tiempo lo vienen haciendo otros aliados como importantes dirigentes del Frente Grande, entre ellos Daniel San Cristóbal, acérrimamente encolumnados con la vicepresidenta Cristina Fernández.

El acuerdo con los gremios con la última mejor oferta del país, provocó también desconcierto en la oposición provincial. El radicalismo tomó un camino intermedio al que vienen reclamando los gremios duros de la docencia que no firmaron el acuerdo y que están demandando una “interpelación” a la ministra de Educación, Daniela Torrente.

Lo máximo que les salió fue un pedido de audiencia con la ministra para conversar sobre la situación generada a partir de este acuerdo parcial, algo que tampoco conforma a los sectores que rechazaron la propuesta oficial.

La esperanza oficial es que el lunes arranquen las clases, o porque los maestros que concurran a dar enseñanza presencial sea porque aceptaron la propuesta o porque los que la rechazan le teman a los descuentos por días de paro.

En definitiva, la cuestión planteada en los términos en que está en la actualidad hace imposible ninguna alternativa de acercamiento entre el sector que encabeza Eduardo Mijno y el gobierno provincial. Allí también abrevan los “autoconvocados” que habitualmente no se sienten representados por las burocracias sindicales, que hacen prever que las situaciones de conflicto van a extenderse en el tiempo.

En el municipio de la capital Gustavo Martínez enfrenta la etapa más delicada en su relación con el Sindicato de Empleados Municipales. El atentado con armas de fuego que sufrió un vehículo que llevaba trabajadores del área de Bromatología abre un inquietante interrogante. ¿Será que la cuestión se llevará al terreno en el que predominan los códigos de la mafia?

El Sindicato de Trabajadores Municipales lo dijo con todas las letras luego de la reunión que tuvo un pico de tensión en la que empleados analizaban ese atentado y las medidas a tomar y en las que repentinamente apareció el subsecretario de Transporte, Luis Cabrera, que no parece estar relacionado con la temática que se estaba discutiendo.

Según el gremio, el funcionario llegó al lugar a mediar con los inspectores, pero terminó acusando a los presentes, ordenando que la manifestación no tome estado público. Cabrera apuntó con el dedo y avanzó de forma amenazante hacia un personal femenino, ordenándole que dejara de filmar la reunión.

Fue en ese momento que los empleados se interpusieron entre la mujer y el Subsecretario, comenzando un forcejeo para sacarlo del lugar. El sindicato reclamó “queremos que la sociedad entienda, el grado de patoterismo que tienen estos funcionarios, porque esta es la forma en que se manejan de manera habitual. Nosotros creemos que al parecer la mafia está en el municipio, porque con ninguna otra gestión pasó lo que sucede con el actual jefe comunal, que no atiende los reclamos de la gente, ni la de los mismos trabajadores”.

En el tema vacunas, el Gobierno nacional parece haber sorteado una de las etapas más críticas en cuanto a la provisión. Afirman que en la provincia se agotaron las dosis de la vacuna china Sinopharm, que debería arribar en los próximos días al país. Pero hay dosis nuevas de la Sputnik V con lo cual debería cobrar impulso la inmunización de las personas mayores de 70 años e incluso de menor edad, para los que la propia edad constituye un factor de riesgo.

Más aún cuando las nuevas dosis de la vacuna china ya cuentan con el visto bueno de la ANMAT para ser aplicadas en personas mayores de 60 años, aunque es de esperar que avance la vacunación para los docentes, policiales y otros sectores esenciales, como los choferes de colectivos o empleados de almacenes o supermercados, que nunca pararon.

Pero volviendo al inicio de esta columna, el impulso a la reactivación económica que propone el gobernador Capitanich está apoyado exclusivamente en la inyección de fondos públicos. En la presentación el ministro Pérez Pons apuntó “Chaco Reactiva son 52 mil millones de pesos que el Estado va a invertir para mejorar el mercado interno, para mejorar y potenciar nuestra producción y empleo, y para generar el plan de infraestructura más ambicioso de los últimos años”, casi como todo lo que hace es lo mejor del país. Habrá que esperar y ver.