El técnico "xeneize" tenía la esperanza de seguir pero no pudo sostenerse por los diez partidos consecutivos sin ganar que dejaron al equipo anteúltimo en la tabla del torneo.

La derrota de Bocaa manos de Estudiantes de La Plata no fue una caída más para el ciclo de Miguel Ángel Russo, que no continuará en el cargo al frente del plantel profesioal.

Sin respuestas desde lo futbolístico, sin el respaldo desde la dirigencia, y sin señales desde adentro del campo de juego por parte de los jugadores, el último entrenador que logró alzar la Copa Libertadores de América con el club de la ribera en 2007 fue despedido y este martes pasará por el Centro de Entrenamiento de Ezeiza para despedirse del plantel.

La eliminación a River en la Copa Argentina pareció darle un poco de aire al Xeneize, en medio de un campeonato en el cual aún no ganó y en el que apenas convirtió dos goles en seis partidos. Por si fuera poco, quedó en la antepenúltima posición del torneo 2021 de Primera División, después de igualar la peor racha sin victorias en el profesionalismo, de diez partidos.

El círculo se completa con la sumatoria de apenas un triunfo en los últimos 16 juegos. La última vez que Boca ganó, lo hizo ante The Strongest de Bolivia, como local, por la última fecha de la fase de grupos de una Copa Libertadores en la que quedó eliminado, no sin polémica, en octavos de final, a manos de Atlético Mineiro de Brasil.

Durante la jornada hubo reuniones y por la noche se confirmó que desde el Consejo de Fútbol se comunicaron con Russo para indicarle que su ciclo había terminado.