La causa caratulada como "robo calificado por utilización de armas de fuego, en despoblado y en banda" se inició tras una denuncia del dueño de una estancia ubicada en Paraje Quiyatí, cercana a la localidad de Paso de los Libres el pasado 20 de mayo.

Dos mujeres y un sereno fueron sometidos a golpes por parte de tres personas, quienes se llevaron de la casa dinero en pesos y dólares además de joyas y armas de fuego algunas de colección.

"El testimonio que se tuvo en cuenta fue del cuidador de apellido Aquino, quien estuvo en el momento del hecho y logró reconocer por la voz al único detenido en la causa de apellido Oviedo, que desempeñó tiempo atrás, tareas en la estancia", aseguró una fuente judicial al portal de noticias confirmado.com.

A Oviedo le decretaron inicialmente tres meses de prisión preventiva.

Luego Aquino, en una ronda de reconocimiento, habría señalado a dos jóvenes de apellidos Camino y Pereyra, por supuestamente haber participado en el ataque.

Los acusados quedaron detenidos varios días, sin embargo el juez de Garantía Daniel Insaurralde ordenó que quedaran en libertad por falta de evidencias.

"Los señalados no tenían antecedentes penales y los resultados de los allanamientos efectuados en sus domicilios particulares fueron negativos", explicó una fuente oficial. "El único que continúa en calidad de detenido es el expeón", agregó.

El hecho tal como se informó en este matutino sucedió en la madrugada del 20 de mayo cerca de la 1. Pero recién 6:30 J. Pasetto, dueño de la estancia, fue alertado por algunos de sus peones de lo sucedido. El hombre se dirigió hacia la comisaría Segunda y acompañado de una comisión policial fueron hasta la estancia en la cual ocurrieron los hechos.

El campo está ubicado en la segunda sección Rural "San Salvador", a la vera de la Ruta Provincial N°49, más precisamente en "Loma Porabé". Al llegar a la casona, fueron recibidos por una mujer de apellido Solán de 78 años, madre de Pasetto. La mujer presentaba golpes en todo el cuerpo y un marcado nerviosismo y alteración por lo sucedido.

La puerta trasera de la casa estaba destrozada y, se presume, que los malvivientes, en total tres hombres fuertemente armados, habrían entrado por allí sorprendiendo a la anciana y una sobrina con discapacidad que vive con ella y que habría enfrentado inicialmente a los ladrones; sufriendo como consecuencia de ello una feroz golpiza.

Se informó que el dinero con el que se alzaron los malvivientes, alcanzarían los 25 mil dólares, más la suma de cuatro millones de pesos. Otros elementos robados fueron joyas y armas de fuego, algunas de ellas, de colección.

Único detenido

La Policía detuvo a S. Oviedo, alias "Cabecita" quien sería un exempleado en la estancia y cuya voz habría sido identificada, no sólo por la mujer mayor que estaba en la casa, sino también por los dos peones que llegaron cuando se concretaba el robo y pusieron en fuga a los delincuentes.