"Le pido encarecidamente que acepte esta dimisión", escribe el arzobispo de Munich y Freising (Alemania) y miembro del Consejo de Cardenales al papa en una carta privada fundamentando su decisión.

El cardenal Reinhard Marx, arzobispo de Munich y Freising (Alemania), presentó su renuncia al papa Francisco tras reconocer su "corresponsabilidad de la catástrofe de los abusos sexuales por parte de los miembros de la Iglesia en las últimas décadas”.

El purpurado, de 67 años, es miembro del Consejo de Cardenales que asesora al Papa en la reforma de la Curia, coordinador del Consejo Vaticano para la Economía desde su creación en 2014 y, hasta el año pasado, presidente de la Conferencia Episcopal Alemana, cargo desde el que impulsó el Camino Sinodal para debatir temas como el celibato, la ordenación femenina, la moral sexual y la acogida a los homosexuales.

La arquidiócesis de Munich y Freising publicó la carta del cardenal Marx al Papa y la declaración personal este viernes 4 de junio en alemán, inglés e italiano. Fechada el 21 de mayo, el purpurado fundamenta las razones para presentar su renuncia al cargo.

“Me gustaría dejarlo en claro: estoy dispuesto a asumir la responsabilidad personal, no sólo por mis propios errores, sino por la Iglesia como institución, que he ayudado a moldear durante décadas”, expone en su carta personal al pontífice, en la que le insiste en que acepte su renuncia.

“Me gustaría mostrar que no está en primer plano el ministerio, sino la misión del Evangelio. Este también es un elemento del cuidado pastoral. Por tanto, le pido encarecidamente que acepte esta dimisión”, subraya.

En relación con la gestión de los casos de abusos en Alemania, el cardenal Marx afirma: "Los debates recientes han demostrado que algunos miembros de la Iglesia se niegan a creer que hay una responsabilidad compartida a este respecto y que, por tanto, la Iglesia como institución también debe ser culpada de lo sucedido y, por lo tanto, desaprueban la discusión de reformas y renovaciones en el contexto de la crisis de abuso sexual”.

Asimismo, sostiene que las investigaciones y los informes de abuso durante los últimos 10 años le demostraron que hubo “muchos fracasos personales y errores administrativos, pero también fallos institucionales o 'sistémicos'”.

El cardenal Marx afirma que espera que su renuncia “envíe una señal personal para un nuevo comienzo, para un nuevo despertar de la Iglesia, no solo en Alemania” y anticipa cómo espera su futuro: “Me gustaría dedicar los próximos años de mi servicio a la pastoral y trabajar por una renovación espiritual de la Iglesia, como usted insiste incansablemente”.+