El joven rosarino Rodrigo de la Iglesia participó de la Copa Ciudad de Rosario de Fisicoculturismo, la cual se realizó el pasado 27 de octubre en el Complejo Cultural Atlas, ubicado en Mitre al 645, y ganó dentro de la categoría junior, clasificando así a la instancia “overall”, que es donde compiten los campeones de todos los niveles.

En diálogo con Conclusión, el joven deportista comentó que el fisicoculturismo es su pasión, y que comenzó a entrenar cuando tenía 16 años e iba al gimnasio de su hermano. “Me encantaba hacer pesas, también miraba mucho los torneos en internet. Quiero tener un buen futuro en este deporte que amo y que me inspira un montón”, manifestó.



Cuando de la Iglesia comenzó a trabajar en la Asociación de Empleados de Comercio, conoció a Leonel “Chino” Gabrielli, quien se convirtió en su entrenador. “Nadie me daba bola, entrenaba solo y no podía marcarme, pero en tres meses con él tuve un cambio espectacular. El año pasado rompí la vergüenza de subir a la tarima, me fue bien con un tercer puesto”, recordó, agradecido, el deportista.

Además, el fisicoculturista recomendó este deporte, aunque aclaró que el mismo requiere “entrenar bien duro, de forma pesada y con mucha disciplina, sin descansar nunca, y seguir al pie de la letra lo que dice un entrenador”.

Tras asegurar que la clave está en poner atención a la técnica y a la postura para evitar lesiones, el deportista recordó a su padre fallecido, quien jugó al fútbol en la ciudad santafesina de Reconquista: “De él aprendí que hay que darlo todo, pero que no siempre lo importante es ganar, hay que disfrutar y es importante conocer el sabor de la derrota. Yo quiero agarrar experiencia en lo que más me gusta, que es el fisicoculturismo”.

Por último, de la Iglesia adelantó que el próximo 1 de diciembre participará de un torneo nacional de fisicoculturismo que tendrá lugar en Rosario. “Quiero llegar a lo más grande, que es el IFBB PRO de Estados Unidos”, cerró el joven.

Por su parte, el entrenador Leonel Gabrielli dijo a Conclusión: “Esta fue la octava edición de la Copa Ciudad de Rosario. Hace 30 años que preparo atletas en alto rendimiento deportivo, pero el caso de Rodrigo es un gran desafío, porque tiene epilepsia y eso le acarrea muchos problemas al momento de prepararse, pero no baja los brazos, es muy disciplinado y atento, le gusta mucho aprender”.

Gabrielli destacó que fue la actitud del joven fisicoculturista lo que le permitió pasar de la categoría Men’s Physique –donde solo se muestra el torso, porque de la cintura para abajo no se evalúa– en febrero, a una categoría más complicada como la de culturismo clásico a fines de octubre.

En este sentido, el entrenador explicó: “En el culturismo clásico el deportista tiene que entrar en una altura y peso específico para dar en una talla y compite mostrando las piernas. En tan poco tiempo Rodrigo pudo desarrollar su físico y logró clasificarse primero en la categoría junior”.

“Hace más de un año que estamos entrenando con Rodri. Yo preparo atletas desde cero, a nuestro gimnasio vienen chicos desde los 8 años, tengo una forma de trabajo muy lúdica direccionada a los niños. Cualquiera puede practicar un deporte, no existen limitaciones. Rodrigo hizo lo que muchos creían imposible”, cerró Gabrielli.