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Rosario Sin Secretos: la mariposa que se voló de calle Córdoba

 

Espléndida se veía calle Córdoba esta mañana, no sólo por el sol radiante, sino por la concurrencia de gente caminando por la peatonal.

Tal vez haya estado así aquel viernes 23 de diciembre en 1960 cuando abrió sus puertas el primer local comercial de la recién inaugurada galería Hermes I, en Córdoba al 1300, cuando aún no era peatonal.

Ahora hay allí otro local comercial dedicado a la venta de prendas infantiles. Con criterio patrimonial, en sus anaqueles superiores conserva algunos elementos que nos llevan a aquellos tiempos.

Una máquina de escribir, autos clásicos de colección, estuches y viejas cámaras fotográficas, antiquísimas botellitas de vidrio de gaseosas (¿habrán quedado de Panambí?), y hasta un sifón como los que acompañaban los tintillos y blancos en la mesa familiar de los domingos al reunir a toda la familia. ¡Otra buena costumbre que debemos afianzar!

 

Pero volvamos al tema del bar americano que abrió, un día como hoy, 64 años atrás.

A pasitos del Cine Palace Theatre (hoy convertido en galería), Panambí era el punto de encuentro obligado de los que venían a Rosario por algún trámite (incluyendo a los que fungían de comisionistas de toda la región, oficio en extinción desde que apareció la virtualidad), y todos aquellos que acertaban a pasar por el lugar.

¿Cómo no saborear allí un Carioca, ese licuado de banana y leche tan espumoso que figuraba al top de las preferencias?

¿Habrá quien recuerde la cinta trasportadora que había en el mostrador para llevar el café al cliente?

¿Memorarán los primeros “Candy” saborizados con chocolate, caramelo y moka de la primer máquina expendedora que llegó a Rosario?

Se cobraban 50 centavos y la máquina la había traído el dueño, Isidro Alonso, desde la mismísima Italia.

Muchas veces era él mismo quien los servía en una copa alta, con platito metálico y una cucharita muy atractiva para esa época.

Sin dudas, un comerciante que “la vio” y supo hacer de la novedad, un magnífico negocio.

Y un detalle muy particular, de pertenencia y soberanía cultural, los pocillitos de café, de porcelana Verbano obviamente, tenían impresas mariposas, las que deben haber quedado grabadas en las retinas de muchos de nuestros mayores.

¿Por qué mariposas? Simplemente porque eso es lo que significa en la cultura precolombina guaraní, la palabra Panambí.

Si lo sabías, nos alegra. Si no lo sabías, contáselo a alguien. Aunque muchos lugares desaparezcan, mantengamos la cultura tradicional, al menos volviéndola a pasar por el corazón que, en conclusión, es lo que significa la palabra recordar.



 

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