Los jubilados terminaron el primer año de la gestión de Javier Milei sin medicamentos gratuitos y con el valor de una canasta básica que supera los montos de los ingresos, teniendo en cuenta que el haber mínimo no llega a los 300.000 pesos y la máxima apenas pasa de 1.700.000.

La tensión entre Casa Rosada y los jubilados alcanzó su punto más álgido a partir de septiembre, cuando Milei vetó la ley, aprobada por el Congreso, que fijaba una nueva fórmula para calcular los aumentos de estos haberes. Si esta normativa no era rechazada por el presidente, los adultos mayores hubieran tenido una mejor recomposición de ingresos, dado que actualmente el porcentaje de incremento está atado a la inflación, aunque con dos meses de atraso, es decir, en diciembre recién recibieron la suba correspondiente al alza de precios reportado en octubre.

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El representante de Jubilados y Pensionados, Marcos Wolman, afirmó que el presidente dejó sin efecto “un aumento de $18.000 de una jubilación que todavía no cubre la canasta básica”.

Semanas después de rechazar la ley jubilatoria y de organizar un asado para “homenajear” a los diputados que impidieron revocar el veto, el Gobierno nacional había informado la decisión de “modificar el Vademecum” y quitar arbitrariamente medicamentos gratuitos destinado a los jubilados, que se gestionaban a través de la obra social PAMI. En ese momento, desde el oficialismo señalaron que quienes ganaran menos de $388.500 y estén inscriptos en el “subsidio social”, continuarían recibiendo medicación cubierta al 100%.

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El trámite para recibir el subsidio social puede demorarse hasta un mes y el sistema de pasos desde la web es engorroso para personas que no están vinculadas con los manejos de las nuevas tecnologías.

Además, deben tener en cuenta que los ingresos tienen que ser menores a 1,5 haberes mínimos o hasta 3 jubilaciones en caso de que el afiliado conviva con una persona que tenga Certificado Único de Discapacidad (CUD); no estar afiliado a una prepaga; no tener más de un inmueble, un vehículo de menos de 10 años ni ser dueño de bienes de lujo y no ser titular de activos societarios que indiquen capacidad económica plena.

Si no se cumplen con los primeros dos requisitos, pero el costo de los medicamentos necesarios es igual o mayor al 15% de sus ingresos, el afiliado puede solicitar la cobertura al 100% a través de una vía de excepción.

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Por último, el gobierno de Milei determinó que los jubilados recibieran un bono de $70.000 durante los primeros días de diciembre. Además, las jubilaciones, pensiones y asignaciones tuvieron un incremento del 2,69% en el último mes del año, cuando también recibieron el aguinaldo -es decir, la mitad del haber más alto percibido durante el segundo semestre-, por lo que “ningún jubilado o pensionado recibió menos de 459.398,14 pesos”.

“Hace 31 años que todos los miércoles nos manifestamos frente al Congreso para que se mejoren las jubilaciones que, en definitiva, son una conquista de la clase trabajadora. Y lo vamos a seguir haciendo”, concluyó Wolman.