Es la jurisdicción que está última en transparencia pública y ayer recibió $100 millones “no reintegrables” de Desarrollo Social de la Nación. ¿Quién controla que esos fondos lleguen a quienes perdieron todo por el fuego? La oposición local mira desde afuera.

Horas antes de arribar a Corrientes con el Jefe de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) en campaña presidencial para el año que viene, el gobernador de la provincia recibió del ministerio de Desarrollo Social de la Nación, $100 millones “no reintegrables en el marco del Estado de Emergencia declarado a raíz de los incendios que afectan a la provincia”, explicó el mandatario provincial.

Dicho monto completó $1000 millones de asistencia nacional a la provincia de los cuales, $700 millones serán para créditos blandos a productores afectados por el fuego.

Sobre los $100 millones “no reintegrables” las autoridades locales no detallaron qué se hará con esos recursos, cómo serán distribuidos: como subsidios, para comprar de forrajes, reconstrucción de viviendas, estancias dañadas por el fuego. Cómo será el mecanismo de distribución de esa “asistencia no reintegrable”.

Hay una secuencia que es interesante de seguir en los últimos diez días. La primera es la llegada a Corrientes del ministro de Agricultura de la Nación a la capital provincial, allí se formalizó la llegada de los primeros $200 millones para créditos blandos a productores. La segunda fue el jueves 6 de febrero pasado cuando también en Corrientes el viceministro de Ambiente de la Nación, anunció la llegada de aviones, helicópteros, brigadistas y otros $200 millones al Ministerio del Interior, para costear toda la logística de esos elementos. La tercera fue ayer. La entrega de $100 millones no reintegrables.

En ninguno de esos anuncios y actos participaron legisladores provinciales del Frente de Todos: diputados o senadores que deberían ser los veedores locales de que esos recursos lleguen a los que necesiten. ¿Y por qué veedores? Por el sistemático ocultamiento de información y la no transparencia pública con la que se maneja la admiración local.

Corrientes está en el último lugar de los distritos en transparencia pública. Ni siquiera se informó oficialmente cuando el gobernador contrajo Coronavirus, según las propias declaraciones del mandatario cuando arribó de sus vacaciones a fines de enero pasado. La ciudadanía nunca supo cuando contrajo la enfermedad, si hizo aislamiento, si lo contrajo en funciones o cuando ya veraneaba en el extranjero.

En diciembre de 2021 el Poder Ejecutivo envió fuera de término el proyecto de Presupuesto para este año, los legisladores tuvieron poco tiempo para evaluarlo y amparándose en las mayorías oficialistas en ambas cámaras legislativas, ese proyecto se aprobó a libro cerrado. Idéntico tratamiento tuvo la cuenta de inversión, rendición de gastos 2020.

Son suficientes antecedentes para establecer veedores y no dar cheques en blancos. La pregunta: ¿Por qué dirigentes locales del Frente de Todos están al margen de las políticas de asistencia del Gobierno Nacional?

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