Organizan un sorteo para poder celebrar los cumpleaños de pacientes. Ya cuentan con un terreno y esperan la autorización para levantar el edificio.

La fundación Vero Luque vende rifas para poder celebrar el cumpleaños de pacientes oncológicos y de otros niños en situación vulnerable. Es una entidad integrada por familiares, amigos y colaboradores de Verónica Luque, quien tuvo una leucemia mieloide aguda a la que no pudo resistir y falleció el 7 de abril de 2019. La niña de Curuzú Cuatiá de 14 años conoció al artista Ricardo Arjona, quien luego le dedicó una canción.

“Desde la fundación hacemos diferentes cosas para los niños oncológicos. Ahora estamos organizando el cumpleaños de los chicos que pensamos celebrar en diciembre. Será para estos pacientes, pero también para otros niños que necesitan este agasajo”, comentó a República de Corrientes la mamá de Verónica, Griselda Castillo.

Por la pandemia y el cuidado que aún deben tener por su salud, comprarán para cada uno de ellos una torta, mantel, bolsitas, gaseosas, comida y hasta un regalo. El festejo lo harán con sus familias y amigos en sus casas.

“El dinero que pueda quedar será destinado a la fundación. Acompañamos a muchas familias que están atravesando por un tratamiento oncológico”, dijo Griselda.

En el hospital Juan Pablo II, la mamá de Verónica comentó que hay cinco pacientes de Curuzú Cuatiá internados en el sector de oncología. Además, hay otros 3 niños que se están haciendo control. En total, son más de 20 los que recibirán su regalo y todo lo necesario para celebrar su cumpleaños en diciembre.

“En el 2019 falleció mi hija, desde ese año ya nos empezamos a juntar con un grupo de personas por la fundación. Creíamos necesario que alguien tenía que estar para dar ese empujón que a veces necesitan los padres para continuar. En el último mes, hubo tres niños diagnosticados con leucemia en Curuzú Cuatiá, nos parece mucho, y estamos acá para acompañar a las familias”, contó Griselda a República de Corrientes.

Están esperando una última aprobación para poder empezar a levantar el edificio donde funcionará la entidad; al respecto dijo que “queremos contar con todos los profesionales necesario para asistir a los papás en este golpe tan duro y para que los chicos también se sientan bien”.

A la vez, recordó que algunos encuentros se realizaron antes de la pandemia, en 2019, en la Sociedad Italiana de la ciudad correntina. También se reunieron muchas veces en su comercio y también de manera virtual por la covid-19.

“Realizamos algunas ferias de platos y pensamos hacer cada año una cena show para recaudar dinero. Hoy, una quimioterapia sale como mínimo $ 25.000. Algunas veces tenemos que ayudar económicamente a las familias”, indicó y precisó que de cinco niños que están haciendo el tratamiento, solo dos cuentan con una obra social.

Destacó que muchas veces ayuda el Municipio de Curuzú Cuatiá en el traslado y hospedaje. La entidad también entrega -si fuera necesario- ropa de cama y gestiona medicamentos.

“A veces espero en la ruta a los camioneros que traen medicamentos que gestionamos. Me da mucho gusto poder ayudar. Además, la gente colabora mucho”, remarcó.

Las personas que quieran colaborar lo pueden hacer transfiriendo el costo de la rifa que es de $ 200. Pueden comunicarse a través del Facebook o al teléfono de Griselda.

La fundación

La familia de Verónica destacó siempre su sonrisa que “cautivó a tanta gente en sus cortos 14 años”. Su artista favorito era Ricardo Arjona y su sueño se cumplió, conoció al cantante quien le escribió y dedicó la canción Ella baila sola, en su disco Blanco.

A modo de homenaje en su memoria, se crea la fundación que lleva su nombre. Es así que procuran con ayuda del tipo emocional, económica y logística, brindar apoyo a los pacientes oncopediátricos y a sus cercanos.

Tienen por objetivo atender necesidades psicosociales del paciente oncopediátrico y/o aquellos con enfermedades que requieran tratamiento prolongado y los que la fundación considere relevantes (por ejemplo, un trasplante de médula), como así también de su familia a lo largo de las distintas etapas de la enfermedad.

Además, brindar información de utilidad acerca de los distintos aspectos relacionados con la enfermedad y su tratamiento; gestionar un lugar físico para actividades y tareas en relación a la obra de la entidad y pueda utilizarse también como lugar de descanso transitorio para pacientes y/o familiares con tratamiento en curso; y elaborar convenios y acuerdos de cooperación necesaria para el desarrollo de actividades con las distintas autoridades gubernamentales y privada para lograr los objetivos de la fundación.

También promueven tareas de investigación y capacitación del personal involucrado en la atención de pacientes, y organizar eventos benéficos con el objeto de recaudar fondos para la fundación.