El gobierno subirá los aportes patronales a las PYMES y se las bajará a las grandes empresas para que las contribuciones patronales de ambos tipos de compañías se igualen en el 19,5%, porcentaje al que se llegará en 2022. La decisión está integrada en la Reforma Tributaria presentada por el gobierno en la Cámara de Diputados.

 

En la actualidad, las empresas más pequeñas y las industriales y agropecuarias tributan 17% mientras que las compañías grandes y las de comercio y servicios lo hacen al 21%.

 

De acuerdo al proyecto, las empresas pequeñas que ya gozan de la rebaja al 17% mantendrán el beneficio, que será quitado para las nuevas que se constituyan a partir de la vigencia de la reforma impositiva.

 

La decisión impone una nueva barrera a la creación de las PYMES, que de acuerdo al último Censo Nacional Económico de 2004 generan el 66 por ciento del trabajo en la Argentina.

 

Este es otro golpe a las PYMES que tienen varios indicadores que muestran un desplome financiero. La producción de este tipo de empresas en la industria llevaba hasta agosto 21 meses en caída de producción.

 

De acuerdo a un informe del Centro de Economía Política Argentina (CEPA) son más de 3 mil las empresas pequeñas que cerraron durante el Gobierno de Mauricio Macri. Las cifras grafican que 3198 empresas cerraron entre diciembre de 2015 y marzo de 2017, un promedio de 7 cierres por día.