Los trabajadores la textil Alpargatas y vecinos de Bella Vista encabezarán el lunes una marcha desde la fábrica hasta el centro de esa ciudad, a la vez que se sumarán al paro general de la CGT, en rechazo al modelo económico del Gobierno de Mauricio Macri que afectó al sector con despidos de empleados y paralización de máquinas en las fábricas.

 

La industria textil correntina, con cinco grandes plantas, suma más de 1.600 trabajadores en la provincia.

 

Agrupados en la Asociación Obrera Textil (AOT), los 462 trabajadores marcharán por las calles de Bella Vista en rechazo a la continuidad de las importaciones de hilos, telas e indumentaria, teniendo en cuenta que los productos que ingresan al país por los puestos de aduana destruyeron la cadena productiva y comercial del sector.

 

Alpargatas viene de efectuar 8 despidos a principios de junio, mientras que puso en marcha un plan de retiro voluntario para aquellos que se quieran retirar de la actividad y un ajuste interno que implica bajar la cantidad de días trabajados durante la semana.

 

En todas las medidas, los afectados son los trabajadores que pierden parte del salario por menor producción y que, a su vez, no pueden negociar ningún incremento salarial para mantener la economía familiar.

 

La adhesión del gremio textil al paro general de la CGT se da en todo el país porque es uno de los sectores industriales más afectados por las importaciones provenientes de Brasil, EE.UU. Colombia, China, Japón y otros países asiáticos.

 

También es afectada por una drástica caída del consumo interno y por alta inflación de costos que se tornó incontrolable por la escalada del dólar y de las tarifas energéticas.

 

Teninmbó, de Esquina, también es fuertemente afectada por lo que en mayo pasado echó a 40 trabajadores y, con esa cantidad, redujo a la mita su planta de personal, por lo que también produce menos.

 

En la Capital de Corrientes, en tanto, la planta de la firma Tipoití se encuentra en alerta amarilla, aunque todavía sin efectuar despidos ni suspender trabajadores.

 

“En el caso de Tipoití, la están peleando, el personal completo trabajando, pero estamos en luz amarilla. Si no se controla la importación tendemos a desaparecer”, afirmó hoy el titular de la AOT, Raúl Esquivel.