La candidatura de Domingo Peppo junto a Gustavo Martínez por el oficialismo partidario del Chaco expone las expectativas del gobierno chaqueño. Lo que verdaderamente está en juego en estas primarias es apenas un adelanto de lo que serán las elecciones de septiembre por la gobernación.

 

Apoyándonos en las palabras presidente del Concejo Municipal de Resistencia están esperando una reelección de Macri antes que el retorno de la fórmula Fernández-Fernández. Las candidaturas de la lista que encabeza Jorge Capitanich dejaron pocas dudas de la influencia de Cristina Fernández y La Cámpora a la hora de elegir los nombres.

 

Lo que quería el verdadero poder de la oposición en la Nación desautorizaba a Peppo. Directa o indirectamente lo desconocía y a la vez lo empujaba a presentarse como finalmente ocurrió.

 

Fue un ida y vuelta tormentoso. De los principales tres candidatos en el Justicialismo dos dijeron primero que sí, luego que no y finalmente estarán en las listas. Capitanich y Gustavo Martínez. Este último junto a Domingo Peppo tiene la parada más complicada.

 

La situación del actual gobernador podría directamente en agosto. Peppo jugó todo el resto. Si la jugada le sale bien, habrá destronado a Capitanich. Si no, no solamente no quedará en ningún cargo. También quedará sin fueros.

 

Gustavo Martínez casi está en la misma situación. Pero él está más acostumbrado a no ocupar cargos públicos, aunque para esos casos siempre tuvo un familiar directo en un lugar importante. Su madre, su padre o su esposa.

 

La parada para él es casi tan difícil como la de Peppo. Quizás más. El electoral de Resistencia se resistió muchas veces a acompañar su idea de ser el intendente de la capital. Esta vez, la cuestión no parece ser distinta.

 

Las relaciones entre los sectores del PJ que irán a las PASO terminarán haciendo tan profundas las diferencias que la cuestión podría tener en septiembre con otra competencia entre un sector oficial del peronismo y otro en una boleta distinta.

 

Pero para llegar a septiembre hay que pasar agosto. Cuando se elija gobernador los resultados de las primarias ya van a estar resueltos. Los sectores que hoy acompañan a uno de los que terminarán derrotados estarán alineados perfectamente.

 

Si las cosas no salen bien para el gobernador, le esperarán los cuatro meses más largos de su vida además de que su futuro será incierto. Para Martínez sería el turno de archivar definitivamente la pretensión de ser intendente de Resistencia.

 

Contrariamente si al que le va mal es a Capitanich sería el momento de partir definitivamente del Chaco.

 

En Cambiemos la cuestión es muy diferente. Capitanich ya había amenazado a abrir listas en todos los municipios que estén en manos de jefes comunales que apoyen. Si cumple, las chances del radicalismo están para varios municipios más que el de Resistencia.

 

Algo similar podría ocurrir en comunas donde gobiernan intendentes que hoy responden a Capitanich.

 

En el rebautizado Cambiemos falta conocer cuál será el resultado de esta primaria. Los alcances que el resultado de las PASO tendrá. No solo para la interna también para la general de septiembre y para el propio Carim Peche. Si existe alguna mínima posibilidad de que gane se sabrá en agosto.

 

El retiro de Ángel Rozas de la política no parece haber sido total. Por el contrario, se transformó en el principal armador. Víctor Zimmermann puede dar fe. Es el candidato a senador nacional aunque haya tenido que imponerse a dos intendentes, Gerardo Cipolini y Alicia Azula.

 

Habrá que ver si esta influencia llega hasta septiembre o se agota definitivamente después de las PASO.

 

Para los principales partidos cuánto pesarán los Fernández y el tándem Macri-Pichetto y si esas boletas estarán en los cuartos oscuro en la provincia.

 

Cerraron las listas, buena parte del proceso electoral nacional y provincial se cumplimentó en esta etapa.

 

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