A siete meses del parate por la pandemia del coro­navirus, la Asociación de Trabajadores de Eventos de Corrientes (Atrec) se movilizó hasta Casa de Go­bierno para pedir que les permitan trabajar de algu­na forma o que le brinden algún tipo de subsidio. Son 112 miembros que no pue­den trabajar desde el inicio de la pandemia hace seis meses.

Los miembros de la Aso­ciación de Trabajadores de Eventos de Corrientes (Atrec), ex Cotradec, se movilizaron una vez más a Casa de Gobierno para pe­dir una solución ante las restricciones de la pande­mia que impiden que tra­bajen. “Pedimos trabajar, ahora que retornaron las reuniones de 10 personas”, explicó el presidente pro­visorio de la asociación, Eduardo Espínola.

“Estamos a casi siete me­ses de no trabajar, de no recibir ningún subsidio, es­tamos en trámite avanzado de recibirlo, yo me debo a la mayoría que ha decidido movilizarse semanalmente hasta que esté materiali­zado el mismo”, aseguró el presidente provisorio de la asociación que nuclea a 112 trabajadores de eventos entre fotógrafos, DJs, mu­sicalizadores, sonidistas, filmadores, decoradores, entre otros.

Espínola expresó que “no se pueden borrar rubros enteros de trabajos para los cuales familias han in­vertido décadas de sus vi­das”. El director provisorio comentó que presentaron un protocolo para poder trabajar que fue devuelto con correcciones y el fun­cionamiento está sujeto a la aprobación del Ejecutivo provincial. “No tenemos para nada un horizonte previsible, los retrocesos que hubo hacen que ahora no haya un horizonte”, la­mentó.

Ante este contexto, ex­plicaron que hay personas que debieron vender perte­nencias para poder generar recursos para no despedir trabajadores. “(Estuvimos) vendiendo algunas cosas que conseguimos con el sudor de la frente de toda la familia y hoy en día tene­mos que deshacernos para no dejar ningún empleado afuera, que es lo primor­dial. Todos necesitan, todos tienen familia, no podemos abandonarlos”. Y agregó, “hay colegas que dependen pura y exclusivamente de ese trabajo y la están pa­sando mal. Queremos tra­bajar”.

También expresó que tie­ne “la esperanza” de que el Gobierno “nos escuche y nos brinde el apoyo”.

Y en su caso particular, destacó que contrajo deu­da “pensando que se podía pagar durante el año y, con esta pandemia, quedamos atrasados con las deudas de los préstamos que hemos sacado para poder mejorar la calidad de atención y de servicio”.