El secretario general de UPCP, José Niz, reclamó al gobierno -en plenas vacaciones- una urgente convocatoria para debatir la cuestión salarial. Siendo el año en donde se prepara el mayor ajuste sobre el sector trabajador, de los cuatro que tendrá la gestión de Domingo Peppo, la cuestión deviene urgente. Las cuentas del gobierno a su vez cierran por encima de los números presupuestados.

 

Sólo si se toma el año que terminó, el gobierno de Domingo Peppo, tomó muy en serio el pedido del presidente Mauricio Macri efectuado a los propios mandatarios a mediados de noviembre pasado. En ese encuentro, alguno de los presentes grabó al jefe de Estado y luego filtró el audio.

 

"Lo he hablado con varios de ustedes, el tema del empleo público y el nivel de salarios, porque si estamos creando todas estas condiciones para que se genere trabajo en el sector privado, el problema es que si les competimos con salarios más altos, el sector privado no va a poder generar la mano de obra que necesita para su crecimiento", advirtió Macri.

 

Así, la política salarial oficial chaqueña terminó un entre un 12 y un 15 por ciento por debajo del dato inflacionario del 2017, que el gobierno nacional remolonea para anunciar, pero que se colocaría cerca de 8 por ciento por encima de la meta original del 17%.

 

A esto se suma que con el último “pacto fiscal” incluido en el paquete de ajuste sancionado a sangre y fuego en el Congreso que incluyó la fuerte poda a los haberes de los jubilados, el gobernador Peppo se obligó todavía más a ser más drástico en 2018, hasta alcanzar el déficit 0 en 2019. Los propios diagnósticos sobre el peso de la administración pública provincial, tal como en los 90, permiten detectar con claridad cuál es el resquicio que el gobierno quiere seguir apretando para acercarse a sus metas.

 

Por el contrario, la recaudación por vía de coparticipación fue en ascenso. Durante 2017 ingresaron a la provincia $ 35.708.349.800. Esta cifra representa un incremento interanual del 34,50 por ciento tomando en cuenta que en 2016 fueron girados algo más de 26.549.503.900. La cifra zanja el debate sobre si el crecimiento es real o nominal. Está además cerca del 10 por ciento arriba de lo que se prevé que será la inflación total del año pasado.

 

Pero al gobierno lo acucian cuestiones más urgentes. La reiterada crisis del agua en Villa Ángela no hace más que demoler los rumores sobre la inversión nacional en territorio chaqueño. De acuerdo con el gobierno en 2018 la cifra será de 65 mil millones de pesos, prácticamente un presupuesto entero extra, pero en dos años de gobierno la gestión provincial ha sido incapaz de resolver la culminación del segundo acueducto al que sólo le falta el 35 por ciento.

 

El 13 de junio de 2016, el ministro del Interior y Obras Públicas, Rogelio Frigerio, y el gobernador de Chaco, Domingo Peppo firmaron en la localidad de Hermoso Campo un convenio por el cual el Gobierno nacional compromete la continuidad de la obra del Segundo Acueducto.

 

Hacia medio año que habían debutado el mandatario chaqueño en su relación con la Nación y Peppo no dudaba en calificar ese anuncio como " un gesto de reivindicación histórica para el Chaco, por lo que tanto hemos peleado". El pueblo de Villa Ángela tiene hoy su reservorio completamente vacío y prácticamente no llega agua por vía del viejo acueducto que a duras penas está atendiendo la demandada de la parte del interior que recorre.

 

Peppo firmó el 15 de febrero de 2017, también con Frigerio “el convenio mutuo de asistencia financiera con el Fondo Fiduciario Federal de Infraestructura Regional (FFFIR), para reanudar y finalizar las obras del Segundo Acueducto del Interior”. Otra vez el acto mereció pomposos calificativos: “esta rúbrica es uno de los hechos más importantes de mi gestión, que garantiza la fuente de financiamiento para terminar una obra clave para el desarrollo de la provincia”.

 

Falta un mes para que esa firma cumpla un año. Y dos meses más para que celebre el primer aniversario a fecha estipulada para el inicio de las obras. Pero lo que está claro es que no hay nada. No sólo no hubo avance, además hay incertidumbre sobre el futuro.

 

El intendente Adalberto Papp, de Villa Ángela convocó a la empresa. El presidente Claudio Wettstein no pudo ir y en su reemplazo concurrió el vocal de Sameep, Omar Rodríguez. El funcionario reveló en esa ciudad que en julio pasado hubo un tercer acuerdo firmado, esta vez con el ENOHSA, para reinicio de obras. Además dijo directamente que “no saben” qué pasa.

 

“Como gobierno de la provincia y como Sameep, hemos cumplimentado con todos los requisitos  que a partir del 2015 y la asunción del nuevo gobierno nos han solicitado para reiniciar las obras.  En julio de este año se firmó un acuerdo con el ENOHSA para la reinicio de obra, que permitió la reinstalación de los obradores. No estamos viendo que se recupere el ritmo de obra que traía desde el 2015, no tenemos conocimiento por qué” admitió Rodríguez.

 

La solución coyuntural está en manos de una lluvia que no depende de la voluntad ni de los villangelenses, ni de Sameep, ni del gobierno. Eso sí, la empresa provincial de agua convocó para el 19 de enero a las 9 en el Salón Obligado de Casa de Gobierno a audiencia pública para aumentar las tarifas. Sólo en eso, hay certezas.