Sigue una trayectoria en bucle. Lluvias torrenciales afectaron vastas zonas de Malaui y Mozambique.
Más de 100 personas murieron en Malaui y Mozambique por las lluvias torrenciales y los fuertes vientos provocados por el ciclón Freddy, que está siguiendo una trayectoria en bucle poco común y regresó por segunda vez en dos semanas al sur de África.
Las autoridades de Malaui declararon el estado de catástrofe. Solo en ese país se reportaron 99 víctimas fatales, según organismos oficiales.
Otras cuatro personas murieron en el vecino Mozambique, dijeron autoridades locales. Las víctimas son de la provincia de Zambezia, en el centro del país. Sin embargo, se teme que el número de muertos crezca con el correr de las horas.
Autoridades trazan un panorama desolador tras el paso del ciclón Freddy
En varias regiones del sur de Malaui, las autoridades declararon el estado de catástrofe, incluido en la capital económica Blantyre, anunció la presidencia. El jefe de Estado, Lazarus Chakwera, “constató con gran inquietud la devastación que el ciclón Freddy está provocando en numerosos distritos (...) y declaró el estado de catástrofe” en el sur, indicó en un comunicado.
En tanto, el instituto nacional de gestión de desastres de Mozambique (INGD) dijo que las consecuencias de la segunda tormenta que tocaba tierra en el país eran peores de lo esperado.
“El número de personas afectadas superó las previsiones”, declaró la directora del INGD, Luisa Meque. Además, dijo que la tormenta golpeó zonas “consideradas seguras”.
Freddy, un potente ciclón que va camino de convertirse en el más duradero jamás registrado, atravesó el fin de semana el sur de África por segunda vez en pocas semanas, reapareciendo tras un primer impacto a finales de febrero.
Freddy llegó a Malui en la madrugada del lunes, tras haber barrido Mozambique durante el fin de semana.
Según la Organización Meteorológica Mundial (OMM) de la ONU, Freddy, que se formó frente al noroeste de Australia en la primera semana de febrero, iba a convertirse en el ciclón tropical más duradero jamás registrado.
Atravesó todo el sur del océano Índico y azotó Madagascar desde el 21 de febrero antes de llegar a Mozambique el 24 de febrero. Tras moverse en una trayectoria de bucle, volvió a golpear la misma zona el fin de semana.