Andrea Collarini, tenista que nació en Estados Unidos y representa a Argentina, realizó su boda al aire libre con varios colegas como invitados y luego se enteró que tenía COVID-19. Juan Ignacio Londero dio positivo en los testeos posteriores al evento.

El tablero con la luz de alerta se encendió repentinamente. Andrea Collarini realizó su casamiento con su pareja Delfina Novillo Corvalán y quiso celebrarlo con varios de esos amigos que cosechó a lo largo de tantos años de carrera como tenista profesional. Tomó los recaudos necesarios ante el contexto pandémico y el evento se llevó a cabo al aire libre, pero el temor se extendió horas más tarde cuando se enteró que tenía coronavirus.

El jugador de 29 años, ubicado actualmente en el 262 del ranking ATP y que tuvo su mejor versión en el 2014 cuando tocó el 186 del mundo, presentó síntomas de fiebre y decidió hisoparse, según detalló la agencia Télam. El correspondiente examen devolvió la noticia menos esperada: él y su esposa dieron positivo, por lo que los asistentes a la fiesta debieron tomar las medidas correspondientes y testearse.

El detalle en la historia es que la gran mayoría de los que estuvieron presentes en su boda comparten su profesión y en los próximos días deberían viajar a Australia para iniciar su sueño en el primer Grand Slam de la temporada. Federico Coria, Tomás Etcheverry, Juan Ignacio Londero, Facundo Bagnis, Renzo Olivo, Andrés Molteni, Guido Andreozzi y el actual entrenador Carlos Berlocq estuvieron entre los presentes.

El Topito Londero (135° del ranking) dio positivo en los tests posteriores al casamiento, según pudo saber Infobae, y transita la enfermedad con “síntomas leves”. El cordobés, campeón del ATP de su provincia en 2019, tenía en su planificación iniciar la temporada ya en la temporada de polvo de ladrillo que se lanzará en esta parte del mundo durante los últimos días de enero.

Por su parte, los novios quedaron aislados en la casa de campo donde realizaron la fiesta, que está ubicada en Villa del Totoral, una pequeña ciudad a menos de 100 kilómetros de la ciudad de Córdoba. Ellos fueron los encargados de tener que darle la noticia a los presentes para que tomen los recaudos correspondientes. Las imágenes del casamiento que compartieron en redes sociales son elocuentes: invitados al aire libre que están alejados de los dos protagonistas del hecho mientras se realiza la ceremonia.

La celebración contó con unos 300 invitados y se tomaron las medidas necesarias de precaución, pero la luz de alerta se prendió para todos los deportistas. Algunos contestaron el contacto de este medio para advertir que hasta el momento habían dado negativo en los testeos y otros optaron por el silencio. Los novios recibieron ambas dosis de la vacuna contra el COVID-19 y transitan la enfermedad sin problemas, a juzgar por las imágenes que ellos mismos compartieron en sus redes sociales.

Aunque la noticia resonó por otro motivo: varios de los tenistas presentes en la fiesta deberían viajar en los próximos días rumbo a Australia para iniciar el proceso de preparación para el Australia Open, el primer Grand Slam del 2022. Pero hay un detalle más: dos de ellos deberán disputar otro torneo antes de ese destacado certamen.

Coria y Molteni forman parte del equipo argentino de la ATP Cup que se disputará del 1 al 9 de enero en Sidney como antesala del Australia Open, que está pautado para el 17 de enero. Ellos están en la delegación que completan Diego Schwartzman, Federico Delbonis y Máximo González y que integra la zona D junto con Grecia, Polonia y Georgia.

Según detalló Télam, la mayoría de los tenistas presentes en la boda iban a viajar el próximo 27 de diciembre desde Chile rumbo a Australia, aunque ahora ese vuelo quedó en suspenso a la espera de los PCR correspondientes más allá de que hasta el momento no se informó oficialmente de ningún otro test positivo.

Argentina tendrá como representantes asegurados en el cuadro singles del primer GS del 2022 a Schwartzman (13° del ranking), Delbonis (44°), Coria (63°), Bagnis (76°), Juan Manuel Cerúndolo (90°) y Sebastián Báez (99°), contabilizando la baja de Guido Pella (74°), quien decidió no estar presente en la cita. Además, la qualy tendrá como principales protagonistas a Francisco Cerúndolo (127°) y Etcheverry (130°). En el apartado de dobles, el país tiene tres representantes en el Top 100: Horacio Zeballos (6°), Machi González (22°) y Molteni (46°).

Collarini es un jugador de 29 años que si bien nació en Estados Unidos es parte de la delegación argentina ya que creció en el país y decidió representar a la celeste y blanca en el circuito. El zurdo firmó un título challenger en su carrera durante el 2019 en Italia y tocó el pico de su ranking en junio del 2014 con la 186ª ubicación. Su objetivo es recuperarse de la enfermedad, obtener el alta y unirse al vuelo que irá a Australia, teniendo en cuenta que en esas tierras habrá varios torneos durante la primera parte del año más allá de la qualy del Grand Slam.