Se sabía y está ocurriendo. La administración provincial quiere, desea, exhibir como un logro político el inicio de clases presenciales a toda costa la semana que viene. ¿Están dadas las condiciones, digamos, mínimas en Corrientes y toda su geografía para una acción de esta envergadura?
En la semana que dejamos atrás e incluso desde siempre, hay un endémico problema con las cuestiones estructurales en la educación. Falta de personal de maestranza, uno de los tantos legados dejados por la última intervención federal a inicios de este siglo. Los edificios escolares derruidos por falta de mantenimiento e inversiones.
Esto que es una constante en nuestra provincia, cobra relevancia significativa por el contexto pandémico que atravesamos. Además, en el mediano plazo al menos, los docentes no tendrán acceso a las vacunas anticovid-19. Lo expresaron las autoridades educativas y sanitarias. Miles de maestros y maestras correntinas deberán exponerse al virus sin ningún tipo de cobertura sanitaria.
Incluso se dio otra circunstancia en las últimas horas antes de iniciarse este fin de semana. Los maestros tuvieron que salir a la calle para reclamar un servicio clave y poder cumplir con lo que por un lado el Estado les exige, pero por otro, no les da las herramientas mínimas para cumplir con esa obligación.
El transporte interprovincial interrumpido hace casi un año por la pandemia. Tras el anuncio del retorno a clases presenciales al parecer nadie reparó cómo cruzarán al Chaco y viceversa los maestros sin ese servicio de colectivos públicos.
¿Nadie reparó en ese detalle? ¿Tanta desidia y falta de interés en el otro?
En diciembre pasado el Ministerio de Transporte de la Nación informó que dicho tramo y ramal entre las dos capitales provinciales, estaba autorizado y que debían ser las autoridades de las dos provincias las que avancen en instrumentar el regreso de dicho servicio.
Tuvo que pasar dos meses y protesta de por medio para que Corrientes despierte del letargo y se dé cuenta del detalle. Exige a sus maestros volver a las escuelas, pero no da los medios necesarios.
Hay educadores en ambos lados del río Paraná. Por eso es vital la conexión terrestre a través del servicio interprovincial. Esta cuestión, insisto con el detalle, vale marcarla porque exhibe la indolencia en la gestión.
Todo el tiempo son anuncios estridentes que acaparan los medios de comunicación, en su mayoría pautados oficialmente sin sentido crítico, pero tras esos anuncios la realidad termina devorándolos.
Por eso se observa en el regreso a clases de manera presencial en la provincia de Corrientes una delgada línea entre la responsabilidad estatal y lo que podría terminar siendo un desquicio ante un brote de contagios Covid-19 en las escuelas.
Alguna muestra hubo en los primeros días en que los docentes y directivos regresaron a las escuelas. Detección de muchos positivos para Coronavirus y poco aislamiento en los establecimientos. Pocas medidas sanitarias para el cuidado de educadores, alumnos, padres y tutores.
No hay que quedarse con los anuncios. hay que trabajar responsablemente en el cuidado de la salud de la población y en cumplimiento de un derecho garantizado por la Constitución y el Estado, como es la enseñanza pública.