Zelenski y Trump coinciden en la urgencia de poner fin a la guerra en Ucrania. La meta está clara, el camino para alcanzarla no tanto. El nuevo secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio , remarca la importancia de lograr una paz «estable» para evitar el reinicio del conflicto. Pero advierte que tanto Moscú como Kiev deberán hacer concesiones. Y es aquí donde la convergencia entre Kiev y Washington puede distanciarse. El presidente del país en guerra ha insistido en su negativa a aceptar cualquier eventual acuerdo que implique la cesión de territorios. Zelenski afirma que no reconocerá la legalidad de la ocupación rusa, aunque todos los aliados intentasen presionarlo para ello. «Esto es imposible. No los reconocemos legalmente. Para nosotros, siempre seguirán siendo territorios ocupados hasta que regresemos allí» destacó el mandatario ucraniano en el Foro de Davos. La cesión de territorios es, precisamente, una de las líneas que barajan los asesores de Trump para abordar el proceso negociador con Rusia.La segunda Administración de Donald Trump llega a pocas semanas de cumplirse el tercer aniversario de la invasión a gran escala. La sociedad ucraniana, que sufre las devastadoras consecuencias de la guerra, ansía la paz. Aunque no una paz a cualquier precio. Las expectativas en Ucrania sobre la hoja de ruta que asumirá el nuevo presidente de Estados Unidos no son claras y reina la incertidumbre. «Algo importante va a suceder, porque Trump tiene determinación, pero también es impredecible en sus acciones. Por otro lado, no considero posible que Zelenski vaya a estar de acuerdo con la cesión de los territorios, eso significaría una guerra civil» destaca Oleksandr Mezitov, un joven de Járkov. «Creo que Trump puede enfriar la situación actual y conseguir una paz temporal, pero Rusia no parará hasta que se desmorone como la URSS» añade.Noticia Relacionada estandar Si Ucrania admite que le faltan soldados para cubrir las necesidades del frente Miriam González El jefe del Ejército traslada a infantería a parte del personal de logística y promete no transferir a primera línea a los especialistas de la fuerza aéreaUna mayoría de los ucranianos consideran que el fin de la guerra está más cerca bajo el mandato de la nueva Administración republicana en Washington. La encuesta del Instituto Internacional de Sociología de Kiev, publicada en diciembre de 2024, revela que un 45% de los ciudadanos están convencidos de ello. Los datos señalan, por otra parte, que sólo un 23% de los encuestados cree que esta paz puede ser completamente justa para Kiev. «Realmente no sé qué pasará con el período de Trump en los EE. UU. Para ser honesta, tengo algunas esperanzas puestas en que la guerra pueda detenerse pronto, pero solo si Rusia sufre mayores sanciones. Sin embargo, también siento mucho miedo de que Trump haga concesiones a Moscú y deje de ayudar a Ucrania» afirma Anna Karbuik, una empresaria de Odesa. En el marco de un cambio de discurso tras la victoria electoral de Trump, Zelenski mencionó la posibilidad de postergar el retorno de los territorios ocupados a cambio de una tregua si el resto del país quedaba bajo el paraguas de la OTAN. La propuesta del mandatario ucraniano apunta a una reintegración por vías diplomáticas de las áreas bajo control ruso. Este plan requiere una posición de fuerza de Kiev acompañada del férreo compromiso de los aliados.Ucrania necesita garantías «confiables»El primer paso es acabar con la fase activa de la guerra insiste el presidente ucraniano. Después será necesario que los socios occidentales se involucren en mantener la paz. «Para garantizar la seguridad de Ucrania y Europa tras un posible alto el fuego, se necesitan garantías confiables, entre las cuales juega un papel clave el despliegue de un importante contingente de mantenimiento de la paz» enfatizó el jefe de Estado de Ucrania. La propuesta de Francia de enviar una fuerza de mantenimiento de la paz a territorio ucraniano ha sido bien recibida por Trump, que exige una mayor implicación de los socios europeos. El presidente Zelenski calcula que será necesario desplegar hasta 200.000 soldados europeos para evitar que Rusia vuelva a lanzar otra invasión en el futuro. El Kremlin ya mostró su oposición a un eventual despliegue de tropas occidentales en Ucrania.La mayor garantía de seguridad posible para el ejecutivo ucraniano sigue siendo la integración en la OTAN. Zelenski retomó la petición en Davos y afirmó que la última palabra la tiene Washington: «Todo depende de Estados Unidos. Si Trump está dispuesto a ver a Ucrania en la OTAN, estaremos en la OTAN». En el segundo día de mandato de Trump la guerra continúa y todavía hay poca información sobre la estrategia que seguirá para finalizar el conflicto. Lo que sí está claro, tal y como admitieron varios asesores del nuevo inquilino de la Casa Blanca, es que un acuerdo entre Rusia y Ucrania podría tardar meses en concretarse. Por su parte, Moscú no ha modificado un ápice los objetivos que persigue con su invasión. El Kremlin exige la «neutralidad» de Ucrania, la salida del gobierno de Zelenski y una gran reducción en el tamaño de las Fuerzas Armadas ucranianas.