Con goles de Tomás Belmonte, José Sand y Nicolás Orsini, el Granate superó por 3-1 al Rojo en el Libertadores de América y se metió entre los cuatro mejores del certamen. Vélez lo espera en la próxima instancia.
Ya se sabía que tres de cuatro equipos iban a ser semifinalistas argentinos en la Copa Sudamericana, pero solo faltaba ponerle nombre al último cupo: Lanús, que venció 3-1 a Independiente en el Libertadores de América, tras el 0-0 en La Fortaleza.
El Granate aprovechó los errores defensivos en la última línea del Rojo, manejó a su voluntad el desarrollo del partido y sentenció la llave con goles de Tomás Belmonte, José Sand y Nicolás Orsini, todo en el primer tiempo.
El desenlace de la historia se vio venir apenas a los tres minutos: el equipo de Lucas Pusineri jugó para atrás, Alan Franco se desentendió con Alexander Barboza y el ex San Telmo cortó al filo a Lautaro Acosta para ganarse la tarjeta amarilla, en una jugada que paralizó los corazones en el banco local.